El astillero vigués Construcciones Navales P. Freire ha despejado su futuro como mínimo hasta finales del próximo año. La dirección de la factoría naval confirmó ayer la entrada en vigor de un contrato con la armadora noruega Prestfjord Havfiske A/V (del grupo marítimo Prestfjord) para la construcción de un buque pesquero congelador de arrastre por popa de 69 metros de eslora, cuyos trabajos comenzarán en agosto o septiembre, como ya avanzó FARO (ver edición del pasado 9 de mayo). Freire, que recupera con la embarcación el segmento de los pesqueros, asegura que el proyecto tendrá una duración de 19 meses y supondrá unas 250.000 horas de trabajo, equivalentes a unos cien puestos de empleo durante el periodo de construcción. Este contrato se suma a los del buque escuela para la Armada de Indonesia (firmado pero pendiente de entrar en vigor) y el oceanográfico para Kuwait (adjudicado).

La firma del contrato se produjo el pasado 25 de marzo en la ciudad noruega de Sorland, ubicada en el círculo polar ártico noruego. Freire se impuso en la consecución del proyecto a otro astillero español con experiencia en el segmento de la pesca, la compañía asturiana Gondán, según ha podido saber este periódico. Fuentes de la empresa viguesa declinaron ayer informar sobre el precio del buque, que estará reforzado contra hielos para la pesca principalmente de bacalao en aguas noruegas, rusas y groenlandesas, apelando a una cláusula de confidencialidad con el armador. Fuentes del sector calculan que el precio de este tipo de barcos oscila entre los 25 y 30 millones de euros. Esta embarcación en concreto ha sido diseñada por la ingeniería Roll Royce Marine.

La entrada en vigor del contrato ha sido posible gracias a la línea sindicada de avales en la que participan el ICO (Instituto de Crédito Oficial), Banco Sabadell y Grupo Banco Popular, con la colaboración de la Consellería de Economía e Industria. Los primeros trabajos en acero comenzarán en "agosto o septiembre", lo que había llevado al astillero a proponer un adelanto de las vacaciones de sus más de sesenta empleados (afectados por un expediente de regulación de empleo temporal, que dejaría de aplicarse entonces). Freire trabaja actualmente en varias reparaciones de buques, a las que sumarán próximamente otras dos unidades.

La firma viguesa avanza también en los otros dos proyectos constructivos logrados el año pasado: el velero de Indonesia y el oceanográfico kuwaití. El primer contrato está firmado y la financiación, adjudicada, aunque faltan los "últimos flecos" para entrar en vigor, según fuentes de la empresa. Una de las fechas que se barajan desde el comité de empresa es la del próximo noviembre. Con respecto al buque de investigación científica de Kuwait, la negociación del contrato continúa, aunque una vez se firme la entrada en vigor sería más inmediata que la del buque escuela.

El último buque construido por Freire fue el RRS Discovery, considerado el oceanográfico más avanzado del mundo. El astillero ya tenía experiencia con armadores noruegos como Voldstad y Rieber (para los que construyó tres buques offshore, de apoyo a plataformas).