Las tres principales sindicales gallegas coinciden en que la caída en las bajas temporales se debe tanto a la reducción de personal ocupado como al "miedo" por perder el puesto de trabajo. "Los niveles de desempleo no son los mismos ahora que en 2007, efectivamente, pero hay mucho miedo al despido", asegura el secretario xeral de la CIG, Suso Seixo. En su opinión, el problema se va a agudizar "cuando las mutuas puedan dar el alta", una de las medidas que ha planteado el Ejecutivo. Por último, cree que "la peor situación" la viven los que han tenido accidentes laborales, precisamente por la "presión" de las mutuas.

Coincide con Seixo su homólogo en CC OO en Galicia, Xosé Manuel Sánchez Aguión. "También está el factor de la pérdida salarial, porque parte de las nóminas son pluses de asistencia y pueden representar el 40%" de la nómina, explica. "Por eso hay gente que va a trabajar con 40 de fiebre", zanja. Por último, el responsable de Empleo en UGT Galicia, José Domingo Barros, cree que los trabajadores gallegos tienen "miedo a represalias", y asegura que hay personas con "enfermedades graves que siguen acudiendo al trabajo" por miedo a perderlo. "Y no olvidemos -enfatiza Barros- que las bajas las concede un médico, no las coge un trabajador por su propia cuenta".