El pasado 22 de octubre compareció en la Audiencia Nacional como testigo el representante de los Carceller en Pescanova, José Carceller Arce (actual consejero), en el caso que investiga el colapso de la pesquera gallega. Fue entonces cuando se conoció que esta familia catalana es la máxima accionista de Pescanova. Al 6,2% que declaran en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) se le suma otro 1,6% que poseen a través de Disa Corporación Petrolífera Disa. La familia no tenía obligación legal de notificar este paquete adicional de acciones, que adquirieron "a finales de 2012 o principios de 2013", según fuentes próximas a la pesquera. Este 1,6% más de títulos en Pescanova sitúa a los empresarios catalanes por encima de Manuel Fernández de Sousa, que tiene el 7,5% de la pesquera.

De acuerdo con el escrito de los fiscales, al que ha tenido acceso este periódico, la participación de Demetrio Carceller Coll (padre de Demetrio y José Carceller Arce) en Disa se articula a través de un complejo entramado empresarial con sociedades domiciliadas en Holanda, las Antillas, Panamá o Chipre.

En el caso de Damm ocurre algo similar. "La participación accionarial de Demetrio Carceller Coll en Damm está situada una parte en la sociedad holandesa Seegrund BV", a su vez controlada por la antillana Nives NH, "participada también" al 100% por Financiera Interconcunental (Panamá). La otra parte, según los fiscales, está en manos de la "sociedad instrumental" Caspian Gestao, situada en la isla de Madeira.

Además de utilizar un entramado societario, Demetrio Carceller Coll "adoptaba numerosas medidas de precaución tales como evitar frecuentar restaurantes o sitios de ocio, realizar sus pagos en efectivo o delegar en su hijo Demetrio Carceller Arce u otras personas de su confianza, como José Serrano Flórez y Gabriel Pretus Labayen, la firma de cualquier negocio u operación económica". Todo, según los fiscales, para ocultar que era Madrid y no Portugal o Reino Unido su país de residencia y eludir pagos a Hacienda.