El repentino fallecimiento del empresario Carlos Pérez Padrón, de 51 años y padre de cuatro hijos, el pasado martes, cuando se encontraba en México por motivos de trabajo, ha provocado consternación en Caldas, lugar donde comenzó su brillante trayectoria profesional tras fundar Eurolatón en 1990. La planta creada en esta localidad en 1995 fue el primer escalón que llevaría al empresario a exportar sus productos de ferretería a países como Portugal, Inglaterra, Francia, Alemania, Venezuela o Egipto, una expansión internacional que llegaría hasta China en el año 1999.

Los restos mortales del empresario serán trasladados en los próximos días desde la ciudad de Querétaro hasta Vilagarcía, su localidad natal, donde recibirá sepultura.