Las entidades financieras chipriotas permanecerán cerradas hasta el jueves próximo, anunció hoy el Banco Central de Chipre en un comunicado.

Tampoco abrirán las sucursales de los dos principales bancos chipriotas en Grecia, el Laiki Bank y el Hellenic Bank, informó la entidad en su nota.

Desde el sábado pasado, el "corralito" parcial impuesto en este país mediterráneo impide cualquier transacción financiera para evitar la fuga de capitales.

Nada más conocerse la noticia de que el Eurogrupo había aprobado en la madrugada del sábado un gravamen sobre todos los depósitos privados -de un 9,9 % sobre fondos superiores a los 100.000 euros y del 6,7 % sobre los inferiores- la gente salió a la calle para retirar fondos de sus cuentas.

Sin embargo, los bancos cooperativos, los únicos que abren en sábado, habían recibido ya la prohibición de permitir transferencias y, al poco de abrir, volvieron a cerrar sus puertas.

Las colas se mantuvieron ante los cajeros automáticos, donde los ciudadanos se apresuraban a sacar el máximo permitido por día, 1.000 euros.

A la vista de que no hubo reposición en las máquinas -hoy es festivo en Chipre- la situación ante los cajeros se había tranquilizado este lunes.

Pérdida de confianza de los ciudadanos

El primer ministro de Luxemburgo, Jean Claude Juncker, hasta hace poco jefe del Eurogrupo, expresó en Viena su preocupación por una posible pérdida de confianza entre los ciudadanos y los bancos por la planeada quita a los ahorradores en Chipre.

"Tengo una gran preocupación de que se produzca un derrumbe de la confianza, no solo entre los bancos, sino también entre los ciudadanos", manifestó el primer ministro luxemburgués a la prensa tras una reunión con el canciller austríaco, Werner Faymann.

El jefe de Gobierno austríaco agregó que es tarea de la Unión Europea (UE) "encontrar respuestas para que los ciudadanos de a pie y de ingresos medios no se vean afectados".

"Si el objetivo es que paguen los oligarcas rusos, que se han instalado en la pequeña isla, casi en un espacio sin leyes, entonces debemos decir también que el trabajador chipriota no tiene ninguna culpa", manifestó Faymann.

La agencia de calificación Moody's ve peligro de que la quita de los depósitos privados en Chipre desencadene una fuga de capitales en otros países afectados por la crisis.

En un informe publicado hoy con motivo de la aprobación por parte del Eurogrupo de un paquete de medidas como contrapartida al rescate, Moody's subraya que la quita programada puede tener no solo graves consecuencias para los ahorradores chipriotas, sino también para los bancos europeos.