El endurecimiento de los requisitos para acogerse a la jubilación parcial pondrá freno a uno de los mecanismos más utilizados por la industria del automóvil para rejuvenecer sus plantillas: el contrato relevo. Solo en la planta viguesa de PSA Peugeot Citroën están previstos 739 contratos de esta modalidad hasta 2015, conforme el acuerdo que empresa y sindicatos firmaron en el actual convenio colectivo.

Según fuentes consultadas por este periódico, los cambios que se aplicarán desde el próximo 1 de abril no afectarán a estas salidas al tratarse de un acuerdo anterior a la norma, aunque ambas partes (empresa y sindicatos) analizarán a fondo la letra pequeña del Real Decreto que saldrá publicado hoy en el BOE.

La Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) y los sindicatos mayoritarios en España, UGT y CC OO, llevan meses presionando al Ministerio de Empleo y Seguridad Social para que en el caso de que se modifique el actual sistema de jubilaciones parciales se respeten los acuerdos de empresa firmados con anterioridad, como el de PSA-Vigo. Anfac asegura que el contrato relevo incide en la competitividad de las empresas, bien por costes adicionales de salida o mermas de competitividad por el incremento de bajas médicas y el absentismo.

Las empresas insisten en que las características de la industria del automóvil -con cadenas de producción sometidas a ritmos, con cambios de turnos y con necesidad de actualizar los conocimientos de los trabajadores- determinan que la edad de jubilación pueda incidir en la productividad y competitividad de las plantas. Muchos de los planes industriales aprobados en los últimos años recogen este mecanismo para rejuvenecer las plantillas.