La entrega ayer del "Deep Orient" a la naviera Technip se convirtió en un acto empresarial y social de primer orden, en el que no faltó una amplia representación de la clase política. Y es que este buque, valorado en 107 millones, marcará un antes y después en la construcción naval gallega al tratarse del primer offshore que se arma al completo con los más sofisticados sistemas de trabajo en grandes profundidades marinas.

El astillero vigués superó con creces las exigencias de la multinacional francesa: la calidad y la seguridad. Así, MetalShips se encargo de instalas los dos ROVs (robots submarinos) con todos sus equipos de control, tarea que hasta este momento se encomendaba a otros astilleros europeos.

Al acto asistieron, entre otros, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; el delegado del Gobierno en Galicia, Samuel Juárez; el conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde; el alcalde vigués, Abel Caballero; el presidente del PP en la ciudad olívica, José Manuel Figueroa; la delegada de la Xunta en Vigo; María José Bravo Bosch; la delegada del Gobierno en la Zona Franca, Teresa Pedrosa; la directora general de Pymar, Almudena López del Pozo; el vicepresidente del Banco Popular, José María Arias Mosquera; o el presidente del Grupo Coren, Manuel Gómez Franqueira. Por su parte, Tecnihp envió a Vigo una amplia representación de la compañía encabezada por su vicepresidente Frédéric Delormel.

En el acto de entrega, el presidente del astillero, Manuel Rodríguez, afirmó que MetalShips fue el primer astillero gallego en construir un buque offshore y calificó de "magnífico barco" el que se entregaba a Technip. También dijo que el astillero está en construyendo en estos momentos el tercer offshore para la naviera norteamericana McDermott. "Si de algo sirve la curva de experiencia es para ir poco a poco corrigiendo los pequeños detalles, hacer el barco mejor acabado que a la vez se beneficia de nuevos equipos que, aunque similares, son más modernos y con mayores prestaciones que los montados en barcos de la misma clase que construimos hace años".

El vicepresidente de Tecnhip, Frédéric Delormel, señaló durante su intervención que estaba deseando incorporar al "Deep Orient" a su flota, ya que la alta cualificación de este nuevo buque aportará nuevas capacidades al servicio que presta la compañía a sus clientes de todo el mundo. Delormel resaltó la ausencia de incidencias significativas y felicitó a los directivos y trabajadores de Metalships por el trabajo realizado y la ausencia de accidentes.

"Vigo es una ciudad que sabe hacer barcos y este es un magnífico ejemplo y el futuro de la ciudad tiene que hacerse sobre las nuevas tecnologías", aseguró el alcalde vigués, Albel Caballero en su intervención en la que felicitó al vicepresidente de Technip por haber elegido este astillero para construir el offshore.

Por último, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, afirmó que las "aguas de Asia van a contar con un navío moderno de acorde con las necesidades de apoyo logístico de las plataformas petrolíferas y gasísticas. Así Vigo y Galicia corraboran su prestigio con sus astilleros que son capaces de competir en el mundo".

Tras la firma de la entrega entre Manuel Rodríguez y Frédéric Delormel, los casi 200 invitados tuvieron la ocasión de conocer todos los detalles del barco por dentro.

Panel de control de los robots - El presidente de la Xunta y el vicepresidente de Technip se sentaron en el panel de mandos desde los que se manejan los dos robots submarinos.

Tres intentos para romper la botella - La madrina del buque, Verónique Delormen, tuvo que emplearse a fondo para estrellar la botella de champán contra el casco del buque.

La madrina probó los camarotes - Verónique Delormen no tuvo reparos en comprobar una de las literas en presencia de Rosa Montenegro, esposa de Manuel Rodríguez.