-Recientemente la Oficina Marítima Internacional informaba de que los ataques piratas en lo que va de año cayeron a niveles anteriores a 2009. ¿Cómo está la situación?

-Ahora mismo la cosa está mejor, aunque desconozco los datos exactos. Tú estás dos meses sin mirar la materia sobre piratería y estás metiendo la pata porque hay modificaciones cada poco.

-¿Está teniendo éxito la Operación Atalanta?.

-Pues parece ser que sí, de hecho se ha ampliado hasta el 2014 después de hacer un ataque en tierra.

-Ahora muchos atuneros españoles llevan a bordo seguridad para luchar contra los ataques piratas. ¿Es una buena medida?

-Detiene un poco la intención. Se han conseguido evitar a los piratas, pero hay muchos organismos internacionales que están en contra de la utilización de eso. Parece que esto va tomando el buen camino en cuanto a la falta de regulación.

-¿Tan mal regulado está?.

-No hay reglas de enfrentamiento claras, porque el día que haya un muerto veremos a ver qué pasa. Hay otro problema desde el punto de vista jurídico. El artículo 4 del código de seguridad de los barcos (ISPF) dice que la máxima responsabilidad en el barco la tiene el capitán.

-¿Y la presencia de vigilancia a bordo le resta responsabilidad?

-Cuando embarcas un grupo de vigilancia, ha habido un contrato entre el armador y este grupo, el capitán no interviene. Hay que delimitar responsabilidades y contradicciones. No puedes ser el responsable y no tener capacidad de decisión.

-¿La presencia de vigilancia a bordo afecta a aquellos buques que no la llevan?

-Está claro que afecta más a los que no lo llevan. Es una conjetura lógica, que conllevará a que pidan rescates mayores.

-¿Qué otro medios existen para luchar contra la piratería?

-Las Best Management Practices (BMP4), que son reglas y recomendaciones para buques que pasan por Somalia. El otro medio sería un buque de escolta armado, que según la normativa internacional es un buque pirata.

-¿Cómo puede ser considerado un buque pirata?

-Porque utiliza armas de cualquier clase y el poder para capturar buques involucrados en piratería solamente se otorga a buques militares, y un buque de escolta no lo es.

-Algunos armadores piden poder llevar a bordo armamento pesado. ¿Sería una buena medida?

-El país de bandera del buque tiene que permitirlo. El problema de las armas pesadas es que si tú pasas con ellas en el mar territorial de un país que no las permite, estás cometiendo un delito.

-¿Qué radio de actuación tienen los piratas?

-Tienen un radio de actuación de tres millones de kilómetros cuadrados. No hay flota mundial que pueda resolverlo. Se dice que con 60 barcos se podría pero allí hay pocos trabajando, igual 10 o 15. El problema es que la extensión del mar a patrullar es tan grande que es imposible que eso sea una solución.

-¿A qué se debe la piratería?

-El mayor problema está en Somalia. Los ataques comenzaron con buques que llevaban alimentos a Mogadiscio por el Banco Mundial de Alimentos. A finales del siglo XIX Italia y Reino Unido dividieron allí sus colonias como les dio la gana. Esto trajo guerras y hambre, uno de los motivos principales.

-¿Cómo actúan los piratas y cuál es su perfil?

-A través de buques nodrizas secuestran un pesquero porque ellos lo que quieren es meterse dentro de un caladero para ver pasar las víctimas y arriar los esquifes. Han ido cambiando el campo de acción. Se dieron cuenta de que era un buen negocio atacar a los mercantes. La mayoría son pescadores. Son muy inteligentes y dicen que actúan como una especie de guarda costera. Son una especie de Robin Hood. Hay hambre y miseria y lo que roban los piratas es la ilusión de los niños pequeños.

-A pesar de los medios para luchar contra la piratería el problema persiste ¿Se podría acabar con ella?

-Mientras ese país no deje de ser un estado fallido y no se afronte estabilizarlo, la piratería no se resolverá. Lo que hay ahora son apaños. Los expertos creen que el problema hay que resolverlo en tierra, ya que ahí está la base del problema.