Nueve compañías se adhirieron al sistema de certificación de la denominación de origen "Mexillón de Galicia" en el último año, un periodo en el que se registró un "notorio" incremento del volumen del mejillón certificado, que pasó de los 8,6 millones de kilos contabilizados en 2010 hasta los 22 millones en 2011. Fueron algunos de los datos que ayer ofreció el presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Mexillón de Galicia, Francisco Alcalde, durante la presentación en Conxemar de la nueva imagen del sello.

Según detalló Alcalde, las nuevas incorporaciones son las de las compañías Isidro de la Cal, Conservera Gallega, Luís Escurís Batalla, Remagro, Conservas de Cambados, Jelopa-Los Peperetes, Conservas Daporta, Cocedoiro Serafín Santorum y Delicias Bomar.

A la presentación de ayer asistió la conselleira do Medio Rural e do Mar, Rosa Quintana, quien alabó el trabajo del sector "año tras año y caminando hacia conseguir un mejor punto de atracción de las miradas de Europa" y consideró que el colectivo da un ejemplo "a seguir por todos" por lo que confió en que "cada vez sean más los productores del mar que logran una Denominación de Origen Protegida".

Posteriormente y a preguntas de los periodistas sobre el malestar del sector mejillonero por la exclusión del origen de los productos en el etiquetado de las conservas que aceptaron incialmente el Parlamento Europeo y el Consejo de Ministros de Pesca de la UE, Quintana, pidió "tranquilidad" al sector y que lean "con calma" el reglamento de la UE una vez sea aprobado. Además, aseguró que el origen de los productos específicos de un lugar -como el mejillón gallego- "figurará" en el etiquetado, ya que aporta valor añadido.

La conselleira también ratificó el objetivo ofrecer la mayor información al consumidor y de diferenciar el producto y avanzó que defenderá "lo que hasta ahora se ha venido defendiendo".

Visión diferente sobre la decisión de Bruselas ofreció Francisco Alcalde, para quien el sector solo recuperará la tranquilidad cuando la UE -en su próximo Consejo de Ministros de Pesca- restituya el artículo del reglamento que hace referencia a la obligatoriedad de indicar el país de origen del producto y que fue suprimido como pretendía la industria.

"No hay otro camino posible", aseguró Francisco Alcalde, quien destacó que la mejor forma de fomentar "los productos de calidad locales" y ponerlos en valor es que los productos foráneos indiquen su origen en la denominación comercial ante el consumidor. Alcalde avanzó que el sector luchará con todos los instrumentos a su alcance para tratar de modificar la decisión de Bruselas.