El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha destacado que la "recesión" presupuestaria que atraviesa España perdurará durante "bastante tiempo", por lo que ya no basta hablar de política de austeridad, sino de "cultura de austeridad".

En un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum en el que presentaba al alcalde de Santader, Íñigo de la Serna, Soria ha destacado que España y sus administraciones ya no podrán gastar como gastaban antes, por lo que ha instado a los regidores a que ejerzan su responsabilidad.

Ante los cambios que han experimentado las ciudades en los últimos tiempos, el titular de Industria ha destacado que las localidades deben disponer de eficiencia energética, así como de redes que aporten valor.

Por ello, ha afirmado que el Ministerio de Industria que dirige ha apostado fuerte por las telecomunicaciones, con el fin de adelantar la entrada de la telefonía de cuarta generación en el año 2015, un objetivo para el que ha subrayado que él y su equipo llevan trabajando en los últimos seis meses con los operadores de televisión para liberar el espectro.

Del mismo modo, ha remarcado que Industria ha abierto líneas de crédito blando dotadas de 500 millones de euros y unos 50 millones de euros de subvenciones para fomentar las infraestructuras de telecomunicaciones, para ayudar a las ciudades a ser "más eficientes" e "inteligentes".

La reforma energética "aún no se aprobará"

El ministro también ha descartado que se vaya a aprobar esta semana la segunda fase de la reforma del sector eléctrico, que está ultimando, y que está basada fundamentalmente en medidas fiscales.

El objetivo de esta reforma es atajar el problema del déficit de tarifa, es decir, el desfase generado entre los costes y los ingresos del sistema y que supera los 24.000 millones de euros.

Sobre las nuevas medidas, que se sumarán a los recortes de costes del sistema adoptados a finales de marzo, Soria ha dicho en alguna ocasión que se "estudia" un aumento de los impuestos indirectos que gravan la generación de energía.

Esto puede traducirse de dos formas: una mayor tasa o peaje para las empresas por la electricidad que generan, independientemente de la fuente con que lo hagan; o un incremento del impuesto sobre la electricidad, que actualmente es del 5,1 por ciento.

Preguntado por la reunión que mantuvo ayer con los representantes sindicales de la minería de Asturias, Soria ha dicho que lo que les planteó fue la necesidad de negociar un nuevo plan que vaya del año 2013 a 2018 con dos objetivos fundamentales: cumplir con la decisión de la UE y con el plan de cierre que el Gobierno del PSOE remitió a Bruselas en agosto de 2011.

La importancia de disponer de este plan a principios de 2013 es que si no hay plan aunque haya recursos presupuestados por el Gobierno, no se dispondría de la herramienta para transferirlos al sector.