España, el segundo país productor europeo de coches, solo vende dentro de sus fronteras uno de cada diez vehículos fabricados en territorio nacional, un desequilibrio que de prolongarse en el tiempo pondrá en peligro a fabricantes y proveedores. Así de rotundo se mostró ayer en Vigo el secretario general y responsable de los sectores de Automoción y Componentes de MCA-UGT, Manuel García Salgado, que participó en una coordinadora del sindicato sobre esta industria, y que reclamó al Gobierno que incentive de nuevo las ventas para que el mercado nacional absorba –al menos– el 20% de los coches españoles.

Ante más de cincuenta delegados ugetistas de PSA Peugeot Citroën y las empresas gallegas de componentes, García aseguró que los centros de decisión de todos los fabricantes instalados en el país –incluso de Seat– se encuentran en el extranjero, y que las marcas tienen en cuenta las ventas en un determinado país a la hora de asignarle nuevos proyectos. El sindicalista recordó que fueron los planes de primas al desguace los que contribuyeron en 2009, en plena crisis del sector, a mantener las plantas españolas, junto con las ayudas al desarrollo industrial. "El mercado español está muy deteriorado. Es hora de pasar de una política de recortes a otra del crecimiento", argumentó.

García repasó la situación actual de los fabricantes de coches y de la industria de componentes en España. Respecto a los primeros, explicó que las previsiones de producción para este año son mucho peores que las de 2011, cuando cayó un 11%, y destacó que con el ritmo actual de ventas en España en 2014 más del 55% del parque móvil tendrá más de diez años de antigüedad, con los problemas que eso conlleva en seguridad y contaminación. El responsable de automoción de MCA también subrayó que la facturación de los proveedores descendió el 17% en 2011, y que el número de ocupados se redujo once puntos desde 2008.

Esta situación obliga, según García, a reorientar la política industrial del Gobierno para apoyar al sector. "Los países que han abandonado el automóvil, hoy se arrepienten", resumió. A su juicio, este motor puede ser la punta de lanza para que España salga de la crisis. Pero eso pasa por:

- Un marco regulatorio positivo. Relacionado con el ámbito de la fiscalidad, las emisiones o la gestión del suelo industrial.

- Mejorar la logística. Es necesario acometer las infraestructuras necesarias para las empresas, especialmente en el transporte de mercancías por tren.

- Innovación. Hay que profundizar en la cooperación y coordinacióin de todos los agentes relacionados con la innovación.

- Mercado. El Gobierno debe recuperar los planes de estímulo para que el mercado sea capaz de absorber al menos el 20% de la producción de coches. UGT recuerda que el automóvil genera unos retornos vía impuestos que "benefician a la sociedad".