El panel de analistas de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) prevé que la economía caiga un 0,8 % en el segundo trimestre respecto al primero, lo que supondría un agravamiento de la recesión en la que técnicamente se ha entrado en marzo tras sumarse dos trimestres consecutivos de contracción.

Los analistas de Funcas calculan que el PIB se contrajo el 0,6 % en el primer trimestre, si bien el dato adelantado esta semana por el Banco de España cifra esa caída en el 0,4 %.

Asimismo, han empeorado su estimación de caída para el conjunto del año, que pasa del 1,3 % al 1,7 %, lo que coincide con la previsión de Gobierno, en tanto que han revisado al alza la tasa de paro hasta el 24 % (tres décimas por debajo de la previsión oficial).

Para el próximo año esperan que el PIB vuelva a crecer en tasa trimestral, salvo por un estancamiento entre enero y marzo, si bien en el conjunto del año consideran que la economía aún caerá dos décimas.

Además auguran que en 2013 se seguirá destruyendo empleo y que la tasa de desempleo subirá hasta el 24,6 %.

El panel de expertos de Funcas explica el empeoramiento de sus previsiones en el agravamiento del clima económico debido a "la perpetuación de la crisis de deuda", que se ha vuelto a recrudecer en marzo por las dudas sobre la capacidad de España para corregir el déficit, la salud del sistema financiero y la debilidad de sus fundamentos económicos.

A ello añade "el fuerte impacto restrictivo de las severas medidas de recorte del déficit que se están adoptando y que van a seguir adoptándose", lo que considera que influirá en el mantenimiento de la "fuerte tendencia a la baja" de los indicadores relativos al consumo y la inversión.

El panel prevé que el consumo de los hogares caerá en 2012 el 1,8 %, en tanto que el gasto de las administraciones públicas lo hará el 7,1 %.

La inversión total retrocederá el 8,4 %, aunque lo hará en mayor medida en la construcción (10,4 %) que en maquinaria y bienes de equipo (6 %).

Respecto a la inflación considera que se situará en el 1,8 %, en lugar del 1,6 % que había previsto con anterioridad, debido al mantenimiento del precio del petróleo en niveles elevados.