El presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, se han mostrado "convencidos" de que el futuro de Grecia está en la zona euro, pero consideran esencial aplicar de inmediato los acuerdos del pasado mes de julio sobre el segundo rescate a la economía helena.

Tras mantener una videoconferencia este miércoles con el primer ministro griego, Yorgos Papandreu, Sarkozy y Merkel, se ha conseguido alejar el riesgo de quiebra del país heleno. Pese a ello, los dirigentes europeos subrayaron "la importancia que conlleva la aplicación estricta y efectiva del programa para enderezar la economía griega, apoyada por los países de la zona euro y el FMI".

Papandreu, por su parte, trasladó a sus socios comunitarios la "determinación absoluta" de su Gobierno de llevar a cabo todas las medidas necesarias para aplicar "el conjunto de los compromisos suscritos".

El cumplimiento de esas medidas condiciona el desembolso de futuros tramos del programa del segundo rescate acordado por la eurozona el pasado 21 de julio para ayudar a Grecia a eludir la bancarrota.

En la entrevista telefónica entre los tres líderes europeos, Sarkozy y Merkel subrayaron que "más que nunca es indispensable aplicar las decisiones adoptadas" en julio para "asegurar la estabilidad de la zona euro".

"La aplicación de los compromisos del programa es indispensable para que la economía griega pueda volver a encontrar las vías de crecimiento sostenible y equilibrado", añade el comunicado hecho público por el Eliseo.

El portavoz del Ejecutivo alemán, Steffen Seibert, aseguró en un comunicado que "el éxito de Grecia, reforzará la estabilidad de la eurozona".