Desde que la pasada semana la canciller alemana, Angela Merkel, visitó España, una de las disputas que se han instalado en la arena política-económica es si el aumento de los salarios debe ir vinculado al aumento de la productividad. Pero, ¿qué es la productividad?

Los tres sindicatos mayoritarios en Galicia llegan a la conclusión de que lo que se pretende con esta medida es ligar el incremento de los sueldos a la subida de los beneficios de las empresas y no con una mayor formación de los trabajadores que se traduciría en un aumento de su productividad.

Demetrio Vázquez, de CC OO, reconoce que en muchos casos el aumento o la bajada de la productividad no es medible. "La productividad en la mayoría de las veces no es objetivable", explica, para añadir a continuación: "La productividad por lógica debería ir ligada al concepto de eficiencia: producir lo máximo posible al menor coste posible". Paulo Carril, de CIG, afirma que "lo que Merkel está haciendo es plantear la versión más esclavista que es vincular la rentabilidad de la producción a los salarios". "Los salarios tienen que estar vinculados al IPC y eso garantiza el poder adquisitivo de los salarios, si no sería la consolidación de la explotación laboral más brutal", insiste.

Por su parte, Eladio Romero, de UGT, también está de acuerdo con la idea de que lo que se quiere es ligar los salarios con la posibilidad de que las empresas saquen más beneficios. "Las empresas deben preparar a los trabajadores para el trabajo que tienen que realizar. Lo que deben hacer es formar a los trabajadores, cualificarlos, para que su productividad sea mayor en el mismo tiempo de trabajo", explica.

Para los tres sindicalistas, vincular los salarios con el aumento de la inflación sigue siendo la mejor receta. Nosotros –apunta Demetrio Vázquez, de CC OO– hemos trabajado durante muchos años con la variable de la inflación prevista y las cláusulas de revisión. Esto nos garantiza poder compensar posibles pérdidas y nos ha funcionado, y entendemos que lo que funciona bien no debe cambiarse".

Vázquez también reconoce que hay empresas que pagan según la productividad, pero el sueldo nunca baja. "Las retribuciones tienen componentes variables, como pluses de productividad. Pero la retribución básica tiene que ir ligada al mantenimiento del poder adquisitivo", apunta. De la misma idea es Paulo Carril, de la CIG. "Los salarios tienen que estar vinculados al IPC", reclama.