La flota del Cantábrico dedicada a la captura de anchoa en el golfo de Vizcaya –buques de Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco– prepara la creación de una marca de calidad que distinga a la anchoa capturada en este caladero con el objetivo de que la especie logre mejores cotizaciones en lonja.

El sector considera que los precios obtenidos por el bocarte en la última campaña –tras cinco años de cierre de la pesquería por la escasez de recurso– han sido muy bajos y espera que un marchamo de calidad permita a la flota lograr mayores ingresos gracias a la diferenciación de un producto "de mucha más calidad que el resto". La misma idea pretende aplicarse en el caso del bonito del norte, con el objetivo de diferenciarlo del resto de túnidos que llegan a los mercados.

Los representantes de la flota reconocen que la anchoa del golfo de Vizcaya ha perdido buena parte del mercado en los cinco años de cierre del caladero pero esperan que en los próximos años se pueda recuperar con precios similares a los anteriores a la veda.

"Va a ser difícil porque ha entrado bocarte de otros países, de menor calidad y mucho más barato, pero esperamos recuperar nuestro nicho de mercado", explica el secretario general de la Federación Galega de Confrarías de Pescadores, Xoán Manuel López.

La iniciativa de crear la marca de calidad salió del Consejo Consultivo Regional del Atlántico Sur, donde todos los representantes del sector, a excepción de los conserveros, manifestaron su apoyo a la creación de un sello diferenciador. "La industria conservera no está de acuerdo porque quiere seguir como hasta ahora: enlatando anchoa de otros países y poniendo en el envase que procede del Cantábrico", denuncia el portavoz de los pósitos gallegos.

Ensayos

El sector pretende acelerar al máximo las gestiones para lograr la marca de calidad de la anchoa pero ve difícil que pueda estar lista para la próxima campaña, que empieza en marzo del próximo año. "Estas gestiones llevan su tiempo. Si pudiera estar para marzo sería perfecto pero va a ser muy difícil", aclara López.

Precisamente, el Gobierno vasco trabaja en dos proyectos para distinguir con ensayos genéticos el bonito del norte y la anchoa del Cantábrico de otros ejemplares provenientes de zonas distintas. De hecho, el trabajo sobre la anchoa está "muy avanzado" mientras que el del bonito comenzará en 2011.

La consejera de Pesca del País Vasco, Pilar Unzalu, considera que la marca es "importante", especialmente para las conservas y los congelados, en un momento en el que los consumidores "demandan productos seguros y saludables" y recuerda que en los últimos cinco años Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco han trabajado de forma conjunta para conseguir un uso coordinado de los nombres de anchoa del Cantábrico y bonito del norte.