La ocupación hotelera durante este mes de julio en la provincia de Pontevedra alcanza el 74 por ciento, seis puntos más que en el mismo periodo de 2009, según el Observatorio de Turismo Rías Baixas.

Aunque se ha reducido el tiempo de estancia y el gasto medio por visitante bajó de los 120 a los 100 euros, con respecto a la anterior campaña turística, el sector "aguanta la crisis mejor de lo esperado", según ha asegurado este miércoles el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán.

En la presentación de los datos del Observatorio, el presidente del Patronato de Turismo Rías Baixas y vicepresidente de la Diputación, José María Figueroa, ha señalado que las previsiones que se habían trazado a principios de julio auguraban una ocupación de 75 por ciento, por lo que las expectativas "se están cumpliendo casi al 100 por ciento".

En cuanto a la estimación de las pernoctaciones en agosto, se espera un 83,66 por ciento, lo que supone un crecimiento del 6 por ciento con respecto al 78,71 por ciento de agosto de 2009.

Tanto José María Figueroa como Rafael Louzán coincidieron en que la crisis económica influye tanto en el descenso del consumo medio como en las reservas de última hora. No obstante, han indicado que "los puestos de trabajo se siguen manteniendo" y, a diferencia de la construcción, la automoción o la pesca, que "necesitan a la Administración para sobrevivir, el turismo no", precisó el responsable del patronato.

Figueroa añadió que el Xacobeo está suponiendo un "plus", a lo que el titular de la Diputación añadió que "el primer destino en Galicia, junto con Santiago, son las Rías Baixas". Además, Louzán destacó que "este fin de semana pocas provincias tienen una oferta turística como la de las Rías Baixas". Así, espera que el comienzo de la feria taurina de la Peregrina en Pontevedra, la Fiesta del Albariño en Cambados, la Romería Vikinga en Catoira y la Fiesta del Cristo en Vigo, atraigan a más de 500.000 personas.

POR ZONAS

Según el Observatorio Turístico de las Rías Baixas, la ciudad de Pontevedra registró en lo que va del mes de julio un 60 por ciento de ocupación, sin tener en cuenta la ocupación "casi total" de establecimientos de menor categoría que absorbe la afluencia de peregrinos. Aún así, José María Figueroa se mostró convencido de que en este último fin de semana habrá una ocupación del 100 por ciento, con lo que espera un repunto de 4 o 5 puntos en el balance final del mes de julio. De cara a agosto, la previsión va del 80 al 95 por ciento.

La ocupación hotelera en Vigo fue del 68 por ciento, cinco puntos más que en julio de 2009, y los cálculos en agosto alcanzan hasta el 80%. En Sanxenxo las pernoctaciones fueron del 75 por ciento, un punto más que el pasado año, a lo que José María Figueroa matizó que por encima de ese porcentaje, "cualquier punto que se suba es un incremento considerable". En Baiona, la ocupación subió cinco puntos con respecto al pasado año, situándose este mes en el 68 por ciento y por encima del 80% en el mes de agosto, según la previsión.

En O Grove los hoteles estuvieron al 78% de su capacidad en este mes, dos puntos más que en julio de 2009, con picos de hasta el 95% los fines de semana en algunos establecimientos. Se espera una ocupación en agosto del 85% en la primera quincena. En cuanto a las comarcas de O Salnés y O Morrazo, de las que por primera vez se obtuvieron datos, ambas alcanzaron una media del 85%.

TURISMO RURAL

Por último, los datos de ocupación en las casas de turismo rural reflejan una ocupación del 70%, tres puntos más que en julio del pasado año, y esperan alcanzar un 80% en la primera quincena de agosto. En cuanto a los campings, han tenido un índice de pernoctaciones del 70 al 75%, el mismo porcentaje que hace un año, y en la primera mitad de agosto esperan un 85%.

Rafael Louzán ha considerado que el de las Rías Baixas es "un producto turístico consolidado, no agotado", a lo que han contribuido las campañas de promoción realizadas tanto en Galicia como en provincias cercanas. También atribuyeron los resultados a la incidencia de los 70 informadores turísticos que atienden las casetas de información situadas en 43 de los 62 municipios de la provincia.

Como ejemplo, Louzán y Figueroa señalaron que en el monasterio de Armenteira, en Meis, se registraron más de 20.000 visitas en los últimos cinco meses y que al monte de Santa Tegra, en A Guarda, acudieron más de 100.000 personas en lo que va de año. El presidente del Patronato Rías Baixas apostó por "trasladar a los ayuntamientos que el turismo es una fuente de ingresos importante para la provincia".

Para Figueroa la apuesta "clarísima" de la Diputación de Pontevedra por este sector "estratégico" está empezando a "dar sus frutos reales". Y aunque "sin caer en la autocomplacencia", José María Figueroa aseguró que las Rías Baixas son "un destino de calidad y no tenemos nada que envidiar a nadie", argumentando que la calidad de los hoteles en esta zona es de "nivel alto".

SEPTIEMBRE

Con respecto a la finalización de la temporada estival, Figueroa adelantó que la Escuela de Negocios de Caixanova ofrecerá un avance, el próximo mes de septiembre, del estudio económico que la Diputación de Pontevedra ha encargado sobre el impacto económico del sector turístico en la provincia, con datos sobre la evolución de la oferta hotelera en los últimos diez años, la aportación al Producto Interior Bruto o el índice de empleo que representa.

También en septiembre, la Diputación y el Patronato convocarán a los 70 informadores turísticos a una reunión para valorar las demandas de los visitantes. "La calidad turística es excepcional", explicó Rafael Louzán, "pero se puede perfeccionar más", concluyó.