El domingo, el grupo de inversión Goldman Sachs puso en duda de la solvencia a corto plazo de España –en julio tendrá que hacer frente al vencimiento de deuda más importante en lo que resta de año–. Fue el último toque de atención, de una larga lista, sobre el estado de salud de la economía española. Sin embargo, todas esos avisos no han influido en las inversiones de las grandes fortunas españolas, que están respaldadas por los mejores asesores financieros.

Las dos grandes fortunas gallegas, Amancio Ortega (1º) y Rosalía Mera (3ª), apostaron en el primer trimestre del año, a través de sus sicavs o sociedades de capital variable, por la deuda española. El presidente de Inditex adquirió bonos, letras y obligaciones del Estado, mientras que la presidenta de la Fundación Paideia optó por el primer producto. Entre ambos poseen más de 96 millones de euros (casi 16.000 millones de las antiguas pesetas). La primera fortuna española y novena del mundo también es el que más dinero tiene invertido en deuda española. A 31 de marzo poseía 83 millones de euros, y lejos de rebajar la cuantía la ha aumentado un 23% con respecto al 31 de diciembre.

Más modesta, aunque también muy relevante es la inversión de la mujer más rica de España y la segunda del mundo que ha logrado su fortuna gracias a su trabajo y no a una herencia. Rosalía Mera invirtió en el primer trimestre 13 millones de euros en bonos del Estado, después de que le venciese a principios de año una emisión de bonos de 10,4 millones. Pese a las dudas sobre la solvencia española, la empresaria ha decidido incrementar su inversión en deuda española en un 25%. Es un porcentaje muy parecido al incremento de su ex marido que ha pasado de tener 66 millones a finales de año a 83 a finales del primer trimestre. Los 83 millones que posee Amancio Ortega en deuda pública española contrastan con los 18,4 que posee de deuda alemana o los 16,8 de la francesa, pese a que ambos países son más fiables que España.

Pero no sólo la primera y tercera fortuna española apuestan por la deuda nacional, también la segunda fortuna del país, Isak Andin, presidente de Mango, también ha apostado parte de su patrimonio en la renta fija de los países con mayor riesgo: Grecia, Portugal, España e Italia.

La rentabilidad de la deuda a 10 años del país apenas ha pasado de los 4,46% en los que cerró el viernes, hasta los 4,55% en los que cotizó ayer. Además, los bonos a 2 años cotizan en torno al 2,8%.

Fuentes financieras reconocen que la inversión en deuda pública española es una buena opción porque el interés que ofrece ahora es alto.