La grada de Río del estadio de Balaídos asistió ayer al despliegue de una pancarta singular y ajena al ámbito del fútbol. Se trataba del cartel que exige la liberación de los 36 tripulantes del atunero "Alakrana" que presidió la concentración celebrada el pasado viernes en Baiona y que ayer llevaron al campo de fútbol amigos y familiares del marinero de Gondomar Pablo Costas, para difundir su exigencia de liberación de los tripulantes del pesquero secuestrado los piratas somalíes.

Mientras tanto, se mantiene la incertidumbre entre las familias de los marineros secuestrados y el sector espera que se agilicen los cambios legeles que permitan el embarque en los buques que faenan en el Índico de agentes de seguridad privada con armamento militar. En parelelo, ayer, la Asociación Española de Escoltas (ASES) alertó de que las mafias que operan en el cuerno de Africa cuentan con numerosos informadores en los principales puertos de la costa de Somalia y el sur de la península arábiga aportando información a cambio de dinero sobre rutas y duración de las travesías de los pesqueros extranjeros.

El presidente de ASES, Vicente de la Cruz, otorgó gran importancia a esta red de informadores dado que, a su juicio, se trata la fase inicial en el proceder de los piratas. Estos informadores, que en su mayoría son trabajadores de las instalaciones portuarias, recaban los datos de las travesías previstas por los barcos antes de salir a faenar. Uno de los datos principales hacen referencia a la seguridad del barco, lo que en ocasiones ejerce un efecto disuasorio en los piratas. Pese a contar con armamento superior, en su proceder impera la premisa de evitar enfrentamientos armados en alta mar.

Por todos estos elementos y dada la fuerte implantación de estas mafias en la zona, desde ASES apuestan por la contratación de agentes de seguridad privada formados y seleccionados por empresas especializadas en España, pese a que esta elección pueda suponer un mayor coste a los armadores de los barcos.