La tercera reunión tras el "periodo de reflexión" que se dieron patronal y sindicatos del Metal de la provincia de Pontevedra terminó con una propuesta de los mediadores de la Xunta que será debatida en un próxima encuentro que se celebrará el martes.

En la reunión de ayer participaron los responsables de las cinco asociaciones patronales afectadas por el convenio, los secretarios del Metal de la CIG, UGT y CC OO y los mediadores de la Xunta: el presidente del Consello de Relacións Laborais, Demetrio Fernández López; el jefe territorial de la Inspección de Trabajo, Carlos Domenech, y el jefe Provincial de Trabajo, José María Casas de Ron.

La propuesta

La propuesta de estos medidores consiste en un convenio de tres años de vigencia y la regulación de la jornada para exceso de días de trabajo anuales. El incremento salarial propuesto es de un 2,5% para este año; el IPC más un 1,50% para 2010 y el IPC más el 1,25% para 2011.

Ninguna de las partes ofreció ayer su opinión sobre el documento de los mediadores de la Xunta y se han dado de plazo hasta el próximo martes para debatirlo en una reunión que se celebrará a las cinco de la tarde en el edificio de la Xunta.

De todas formas parece que existe un cierto optimismo entre las partes sobre que se pueda alcanzar un acuerdo la próxima semana.

El convenio del metal de la provincia de Pontevedra afecta a una total de 2.200 empresas que dan trabajo a 22.000 personas.

La huelga del sector del Metal significó un duro golpe para un gran número de empresas que sufrieron pérdidas estimadas en más de 1.000 millones de euros. El sector más castigado por el conflicto fue el naval que sufrió fuertes retrasos en las entregas que significaron penalizaciones económicas por parte de los navieros que habían contratado los barcos.

La firma del convenio no garantiza en principio la paz laboral. Hay otro frente abierto por la sentencia del juicio celebrado contra trabajadores del metal acusados de provocar disturbios durante las manifestaciones en favor del convenio.

Así, la CIG ha convocado en solitario para el próximo lunes día 19 movilizaciones en protesta por las elevadas multas que han sido impuesta a esos trabajadores y que oscilan entre los 300 y 1.000 euros.

Además, si antes no se logra un acuerdo podría producirse una nueva jornada de huelga el día 28 de octubre convocada en 18 provincias por CC OO y UGT contra el bloqueo de los convenios colectivos.

Si las empresas de la provincia de Pontevedra no logran antes un acuerdo, los 22.000 trabajadores del sector de la provincia se verían abocados a una nueva jornada de paro.

Los sindicatos culpan a la CEOE de tener una "estrategia planificada" para retrasar lo más posible la firma de convenios sectoriales para forzar una reforma laboral más profunda y estricta.