Los representantes sindicales de CC.OO., UGT y CIG criticaron hoy a la nueva administración gallega por "pasar" del conflicto abierto con la negociación del convenio colectivo del Metal para la provincia de Pontevedra, y por no haber asumido "su papel de mediadora" en dicho conflicto.

Así lo manifestó hoy el responsable de CIG-Metal, Miguel Anxo Malvido, quien lamentó la posición de la Xunta de mantenerse al margen "aún sabiendo que el sector genera conflicto no sólo en los centros de trabajo, sino que su salida a la calle provoca molestias a los ciudadanos".

Los portavoces de los tres sindicatos entregaron hoy en el registro de la Xunta la convocatoria de huelga en el sector, para los días 6 y 7 de mayo, y que afecta a unos 25.000 trabajadores de industrias como la construcción naval, fontanería y calefacción, automoción o la venta de coches. Además, confirmaron que el próximo lunes comenzarán a organizarse los piquetes informativos, que tendrán presencia "en todas las localidades importantes de la provincia".

El representante de CC.OO., Ramón Sarmiento, advirtió de que "se plantea un escenario corto de negociación", con una reunión prevista para esta tarde --en la que se abordará la regulación de las jornadas de trabajo-- y otra para el próximo martes -con el tema salarial como telón de fondo--. "No es posible un calendario indefinido de negociación, con estas posiciones inmovilistas", añadió.

El portavoz de UGT, Diego Atanes, recordó que los sindicatos "estuvieron siempre abiertos a negociar en todo momento y lo siguen estando", y que la convocatoria de dos días de huelga para la semana que viene "es una advertencia de que ya no hay más plazos ni más tiempo".

Además, los representantes de los trabajadores recordaron que, si no hay avances en la reunión del próximo martes, se anunciarán medidas adicionales de presión y movilización.