Sin tener en cuenta este ingreso extraordinario, el beneficio ordinario neto del grupo aumenta un 11,2 por ciento hasta 301 millones de euros, según las cuentas remitidas por la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La cifra de negocio creció el 1,6 por ciento, hasta los 4.080 millones de euros, en tanto que el beneficio bruto de explotación o Ebitda aumentó el 4,9 por ciento, hasta 383 millones de euros.

El área de servicios industriales y energía fue la que más aportó a la cifra de negocio del grupo, al ingresar 1.721 millones de euros, el 10 por ciento más, gracias a la evolución de los proyectos integrados y a la actividad internacional.

La actividad constructora de la compañía, que hasta ahora era la más importante del grupo, facturó 1.587 millones de euros, lo que supone un descenso del 9,9 por ciento respecto al primer trimestre de 2008.

Esta caída se debe al desplome de la edificación, tanto residencial (-28%) como no residencial (-17,6%) y pese al aumento del 31 por ciento del negocio internacional.

La cifra de negocio del área de medio ambiente y logística aumentó un 0,4 por ciento, hasta los 769,1 millones de euros, gracias al buen comportamiento del negocio medioambiental (+12%) y de mantenimiento integral (+4%), frente a la caída de los servicios portuarios y logísticos (-26,2%).

La actividad concesionaria registró 29 millones de euros de ingresos en el primer trimestre, frente a los 11 millones de un año antes.

La cartera de proyectos de construcción cayó un 7,3 por ciento, hasta los 11.071 millones, en tanto que la de servicios industriales y energía creció un 5,1 por ciento (6.483 millones) y la de medio ambiente y logística, un 9 por ciento (17.366 millones).

La aportación al beneficio neto de las empresas en las que participa: Abertis (con un 25,8%), Hochtief (con un 30%) e Iberdrola (con un 12,6%) ascendió a 51,9 millones, frente a las pérdidas de 23,9 millones que supusieron un año antes.

Como consecuencia de la venta de su participación en Unión Fenosa, el endeudamiento neto del grupo ha disminuido hasta 8.983 millones de euros, la mitad que un año antes, si bien en diciembre de 2008 ACS ya tenía reclasificada dicha deuda en un apartado contable diferente a la espera de que se consumara el traspaso de la eléctrica.

Al cierre del trimestre la deuda con recurso se situaba en 123 millones de euros, mientras que la financiación sin recurso ascendía a 8.860 millones, de los que 5.461 millones se corresponden con la deuda asociada a la adquisición de las acciones de Hochtief e Iberdrola.

Esta última cifra incluye la renovación del contrato de derivados por el que ACS controla de manera indirecta el 5,1 por ciento de Iberdrola. De hecho, ésta ha sido la principal inversión del periodo (2.354 millones).

El resto de las inversiones se realizaron en el área de construcción (31 millones), concesiones (34 millones), medio ambiente y logística (77 millones) y servicios industriales (339 millones).

Al cierre de la sesión, los títulos de ACS crecieron un 3,03 por ciento, hasta situarse en 37,40 euros.