¿Crisis económica o cambio de ciclo? Esta fue la cuestión que la empresa viguesa Grupo Base puso sobre la mesa para que la analizarán el Presidente y director general de Pepsico España, el vigués Antonio Soto Conde; el vicepresidente de la Fundación Galega para a Sociedade do Coñecemento y el ex presidente de Banesto y abogado del Estado, el tudense Mario Conde Conde. Doscientos invitados en el salón actos de Los Escudos para intentar entender una situación económica sobre la que los expertos no se ponen de acuerdo ni en sus orígenes ni en sus consecuencias.

El presidente de Pepsico explicó el impacto de la crisis en el sector del gran consumo. Para Antonio Soto la economía española de los últimos años se basaba en tres motores principales: construcción, turismo e inmigración que propiciaron una fuerte expansión de la demanda interna, en la que se mantenía una alta tasa de inflación y baja productividad en relación a los países de nuestro entorno. A la vez que se mostraba incapaz de generar empleo constante a tasas del Producto Interior Bruto inferiores al 3%.

"Este crecimiento se ha visto afectado por un cambio claro de tendencia en todos y cada uno de estos factores. La construcción ha entrado en recesión, el turismo presenta claros síntomas de estancamiento y la entrada de inmigrantes se ha ralentizado. todo ello ha creado una retracción de la demanda interna con unos niveles de crisis psicológica que acompaña a la muy real crisis económica", indicó Soto Conde.

Afirmó que antes de la crisis existía una corriente de consumismo que fue abrazada por el gran público como una señal de pertenecia a la clase media, mientras que ahora el nuevo consumidor siente y actúa diferente.

"El nuevo consumidor es más consciente de la salud, del bienestar, de la sostenibilidad y de la responsabilidad social corporativa de sus marcas y empresas preferidas", añadió

Soto Conde cree que Internet ha acelerado la transferencia de poder al consumidor que le permite elegir mejor. Recordó que los hogares españoles han cambiado, ya que el 48% están formados unicamente por dos personas.

También señaló el consumo en el hogar cambia con la mayor distensión de horarios en la semana laboral y escolar y el efecto enclaustramiento en unos hogares más cómodos y repletos de novedades tecnológicas para cada miembro familiar. " La crisis revoluciona esta evolución del consumidor. Las finanzas familiares son la primera preocupación de los españoles acompañada de la seguridad en el empleo. Y ese consumidor esta más preparado en calidad y precio. Lo que no quieren es que les vendan, quiere comprar. Y dispone de todas esas herramientas para exigir un mayor valor por lo que compra", señaló.

El presidente de Pepsico señaló que los consumidores, una vez cubiertas sus necesidades básicas, están reduciendo sus gastos más suntuarios: ocio, ropa y novedades tecnológicas.