Los planes multimillonarios que el Gobierno ha dedicado al sector financiero para devolverle la liquidez precisa para volver a prestar dinero no están teniendo toda la inmediatez esperada.

En este sentido, el vicepresidente Solbes urgió ayer a representantes de los principales bancos y cajas a dar traslado del apoyo recibido a las familias y empresas para tratar de que reactivar la economía.En el Gobierno existe preocupación porque garantizar el flujo de crédito representa en este momento “uno de los problemas más serios” para la economía española.

En una reunión celebrada en el Ministerio de Economía y Hacienda, Solbes analizó junto a representantes del sector el Fondo de Adquisición de Activos Financieros (FAAF) y la concesión de avales a las nuevas emisiones de las entidades de crédito, y les urgió al trasladar “cuanto antes” a familias y empresas la medidas de apoyo a la financiación puestas en marcha por el Gobierno.A la reunión asistieron el presidente del BBVA, Francisco González; el presidente de La Caixa, Isidre Fainé; el presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, y el vicepresidente del Banco Santander, Matías Rodríguez Inciarte.

Asimismo, estuvieron presentes como los presidentes de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, y de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA),Juan Ramón Quintás, y el secretario de Estado de Economía, David Vegara.

Según informó el Ministerio de Economía,el sector financiero considera que las medidas puestas en marcha por el Gobierno “son útiles” para mejorar la oferta de crédito en un contexto de desaceleración económica. Asimismo, han mostrado su “total disposición” para utilizarlas y lograr su objetivo último, el de la mejora de la financiación de operaciones solventes de las familias y empresas.

El secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, reiteró al respecto en declaraciones antes de comparecer en la Comisión de Economía del Senado que el deseo del Gobierno es que las medidas puestas en marcha por el Ejecutivo para facilitar el crédito a las entidades financieras lleguen a “familias, empresas y consumidores”. Las medidas son básicamente dos: subastas de liquidez y avales públicos para la emisión de deuda, opción esta última a la que está acudiendo en masa las entidades financieras.