La crisis se instala en Galicia. Cuatro de cada diez empresarios confiesa tener problemas financieros y el 62,8% pronostica que sus compañías cerrarán el año con una reducción de sus resultados netos de explotación.

El Instituto Galego de Estatística (IGE) acaba de constatar un aumento del pesimismo entre los empresarios durante el tercer trimestre del año, en el que el Índice Gallego de Confianza Empresarial (Igace), ha descendido diez puntos, hasta situarse en -40,8.

El Igace, que se obtiene a partir de una serie de encuestas a los empresarios de la construcción, la industria y el comercio, se ha desplomado un total de 28 puntos en el último año. El mayor descenso de la confianza se produce en el sector Industria, con una reducción de 11,7 puntos y la menor, en el comercio al por menor, donde la disminución es de 3,7 puntos.

Ante la crisis, la construcción es lo que más se resiente. El 59,2% de los empresarios de este sector admite tener problemas financieros y un 67,8% cree que acabarán el año con un resultado neto de explotación en descenso. Por detrás de los constructores, se sitúan los propietarios de empresas de servicios; el 66% da por hecho que sus empresas aún vivirán momentos peores que los actuales antes del cierre de 2008. Las previsiones de los industriales son algo más optimistas sobre el empleo. Casi la mitad (49,4%) da por hecho que se destruirán más puestos de trabajo antes de la entrada de 2009, aunque se reduce la diferencia entre éstos y quienes confían en un mantenimiento de los actuales empleos, que ya son el 47,3% de los encuestados.

Entre los empresarios del sector industrial son mayoría incluso los que apuestan por una estabilidad del empleo y aunque la construcción prevé un descenso, los más pesimistas (57,8%) ya son menos que en el segundo trimestre del año (66,1%).

Por tamaños de empresas, sólo los pequeños empresarios y los que gestionan compañías de entre 50 y 99 empleados creen que el paro seguirá aumentando hasta finales de año, mientras que tanto los grandes empresarios como los que dirigen compañías de entre 10 y 49 trabajadores auguran un mantenimiento de los actuales puestos.

El Índice Gallego de Confianza Empresarial, que oscila entre un máximo de 100, que definiría la confianza máxima, y un mínimo de -100, empezó a calcularse en Galicia en 2007. En su breve historia, ha pasado de ser el índice más alto de los que se calculan en España a desplomarse paulatinamente desde el segundo trimestre de 2007. El mayor desplome se produjo sin embargo entre el primer y segundo trimestre de este año, con una caída de casi doce puntos.