El objetivo está marcado: hay que salvar al sector de la automoción. Y hay que hacerlo de una forma "coordinada" y dentro del marco europeo. El encargado de transmitir el mensaje fue el ministro de Industria, Miguel Sebastián, que se reunió ayer en Santiago de Compostela con representantes de nueve comunidades autónomas, con el fin de proporcionar una solución a esta crisis. Por ello, y en su primera toma de contacto en este sentido, acordaron poner en marcha un plan integral de la automoción para el próximo enero.

Pero no fue la única medida que propuso el ministro para aliviar los efectos de la caída de la demanda en el sector. Sebastián anunció que el próximo viernes negociará con representantes de la factoría de Vigo de PSA Peugeot Citroën la fabricación de un coche eléctrico en la planta, con el fin de aliviar los efectos de la crisis. De este modo, se creará un grupo de trabajo específico entre el Ejecutivo central, la Xunta y Citroën para abordar los problemas específicos de la comunidad gallega.

Desde la multinacional francesa confirmaron la existencia de esta reunión, que abarcará otros temas relacionados con la innovación y el desarrollo, así como la asistencia al encuentro del director de la factoría, Pierre Ianni. No obstante, la firma dejó claro que "lo más importante ahora" es reactivar el consumo. "Sólo se superará esta situación cuando los usuarios vuelvan a comprar coches", insistieron.

Según el Gobierno, la implantación de este coche eléctrico en la planta de Vigo tendría como objetivo final aumentar la carga de trabajo, para evitar situaciones como las registradas recientemente, como son la supresión del turno de noche y el parón de la producción hasta después de Navidad.

Esta medida no será exclusiva de la planta de Citroën, sino que también se ha acordado para Renault en Castilla y León y para Nissan en Cataluña, que también están padeciendo los efectos de la crisis. Por ello, Sebastián aseguró que su departamento va a trabajar en este proyecto para que se convierta, lo antes posible, en "una realidad industrial". La rapidez a la hora de conseguir este acuerdo fue también celebrada por Pérez Touriño, quien insistió en que en la situación actual las medidas a corto plazo "son indispensables".

Fuentes del sector automovilístico apuntaron, sin embargo, que el desarrollo de un coche eléctrico en Vigo es una solución a largo plazo, "a tres o cuatro años vista", y que lo que urge ahora es reactivar las ventas de automóviles.

Por otra parte, el plan integral de la automoción anunciado ayer todavía no está perfilado con detalle. El ministro de Industria aseguró que se trata de un "único" plan y "no de nueve", porque la "solución" es actuar "rápidamente y de forma coordinada" para que la industria de la automoción "se quede" en España y no se deslocalice.

El proyecto contempla medidas a medio y largo plazo, y también de más corto alcance. De este modo, abordará la vertiente logística, de formación, de innovación y de relaciones laborales, además de medidas de empleo y financiación a empresas. Todo ello en el marco del diálogo social, entre comunidades autónomas y teniendo en cuenta la iniciativa europea, que se hará pública hoy. En este sentido, el ministro insistió en que la única forma de recuperar la demanda es en el ámbito europeo, ya que recordó que gran parte de la producción española se vende fuera de España. Por ello, Sebastián aseguró que el Gobierno trabajará para conseguir que haya un plan del automóvil europeo.