Agencias / MADRID / LONDRES

La fusión entre Iberia y British Airways anunciada AYER en Madrid creará, cuando se produzca, la tercera línea aérea del mundo y la segunda de Europa por detrás de Air France-KLM, con más de 200 destinos en cien países y una flota superior a los 450 aviones.

En una rueda de prensa conjunta el presidente de Iberia, Fernando Conte, y el consejero delegado de British, Willie Walsh, indicaron que la fusión se llevará a cabo en un plazo inferior al año, aunque "aun hay muchas decisiones que tomar y acuerdos que adoptar", porque lo que se anunció ayer es un primer paso.

Ambos máximos directivos se congratularon de que este proceso haya sido aprobado unánimemente por los respectivos Consejos de Administración, y añadieron que ahora lo que queda es estudiar la forma en que se va a llevar a cabo y "esperar la aprobación por parte de los órganos directivos de cada sociedad".

Por su parte, Walsh, indicó que "no podemos dar más detalles de la operación, tan sólo decir que estamos ante un día histórico para el sector a nivel mundial", y confirmó que se llevará a cabo en menos de un año.

La operación se hará a través de la creación de una nueva sociedad en la que estarán los accionistas de ambas aerolíneas, que mantendrán sus marcas y cotizará tanto en la Bolsa de Madrid como en la de Londres.

El proceso va a ser, según Conte, "totalmente diferente al que llevaron a cabo en el 2004 Air France y KLM", porque aquel consistió en una ampliación de capital de la aerolínea francesa para comprar las acciones de la holandesa, mientras que este caso "se va a crear una sociedad con el accionariado de ambas líneas aéreas".

La participación de cada una en el accionariado de la nueva sociedad es algo que "aun está por analizar", ya que todavía no se sabe cual es la ecuación que se va a aplicar en el canje de acciones.

Lo que sí está claro es que la capitalización bursátil de British Airways es superior a la de Iberia, la empresa británica está en el orden de los 9.000 millones de euros, mientras que la española se sitúa entorno a los 1.800 millones de euros.

No obstante ambos máximos dirigentes preven que seguirá siendo un accionista de referencia Caja Madrid, que posee el 23,42% del capital de la empresa española.

Confiamos, dijo Walsh, en que Caja Madrid siga con nosotros, porque su participación es "muy importante" tanto para Iberia como para British.

Aunque no se puede dar un calendario de consolidación de la operación, lo que sí anticiparon Conte y Walsh es que al mantenerse las dos marcas van a existir tres consejos de administración diferentes, uno por cada sociedad, más el que se cree con la nueva empresa.

Iberia cerró ayer en la Bolsa a 1,98 euros la acción con un aumento del 20,73%, mientras que British ganó un 5,97% para situarse en 2,48 libras por título.