De hecho, el grupo de construcción, servicios y energía resta importancia a los comentarios sobre una ruptura prematura y ha diseñado un futuro para Acciona apegado a Endesa hasta 2012. En esa fecha, la constructora se habrá nutrido de dividendos de la eléctrica y espera contar con un grupo eléctrico convencional propio y con el control de una empresa de renovables que espera constituir a finales de año y que integrará activos de Endesa.

Según el acuerdo firmado entre ambos socios en marzo de 2007, no hay posibilidad de liquidar la relación de las partes en Endesa antes de 2010. Entre 2010 y 2012 podrá haber ruptura si existe una situación de bloqueo. Sólo desde 2012 y hasta el final del contrato, en 2017, se podrá instar a la división del patrimonio sin necesidad de situación de bloqueo.

De esta forma, el proceso eventual de ruptura del pacto y el reparto final de Endesa no comenzaría hasta 2010, y a la vista de su complejidad y de los trámites legales y jurídicos necesarios, probablemente se prolongaría hasta 2012.

Una vez iniciada la separación, Acciona podrá elegir entre dos opciones la que más le convenga para salir de Endesa. La primera consiste en la compra por parte de Enel del 25% de Acciona al precio de la OPA, esto es, 40,16 euros más euríbor más 0,85 puntos. De este importe se descontarán los dividendos recibidos.

Acciona calcula que si a día de hoy se aplicase esta opción, el precio de su 25% sería de unos 11.200 millones, frente a los 9.000 millones invertidos en la participación, de modo que las plusvalías latentes superan ya los 2.000 millones.

PREFERENCIA POR LOS ACTIVOS.

La segunda opción permite al grupo de la familia Entrecanales elegir activos de Endesa equivalentes al 30% del valor del grupo sin deuda y formar con ellos su grupo eléctrico convencional propio.

Para la asignación de este 30% de los activos, se designarán bancos de negocio, que crearán varios paquetes de activos "armónicos, coherentes y eficientes", para que Acciona escoja el que desee.

Las fuentes indican que Acciona prefiere esta segunda opción, ya que a partir de ella el grupo sería capaz de construir una eléctrica convencional, del tamaño de HCEnergía o Viesgo, y consolidarse en el sector energético.

Los activos incluirían algunas centrales en Latinoamérica. Los bancos de negocio buscarán la armonía en los activos correspondientes a la Península Ibérica para facilitar su explotación empresarial, y también harán agrupaciones geográfica a nivel internacional.

En los lotes se incluirán negocios integrados en electricidad --generación, distribución y comercialización--, ámbitos territoriales coherentes y un 'mix' de generación equilibrado.

LAS OPCIONES DE ENEL.

Pese a que el acuerdo no permite a Enel romper el pacto de accionistas antes de 2010, el grupo italiano podría recurrir a dos opciones. Por un lado, podría hacer cambiar de opinión a Acciona comprándole su 25%, pero para ello debería ofrecer una prima que, según las fuentes consultadas, debería ser muy generosa.

La otra opción consiste en denunciar ante un tribunal el incumplimiento del acuerdo y lograr su nulidad. El grupo italiano ya estudia medidas de este tipo a propósito del voto de calidad del presidente de Endesa, José Manuel Entrecanales, utilizado a su juicio de forma ilegal en cuestiones que requieren una aprobación mancomunada.

Acciona asegura que Entrecanales no ha hecho hasta el momento uso del voto de calidad en ninguna ocasión y duda de que el grupo italiano pueda llegar muy lejos en una hipotética estrategia que buscara la anulación judicial del acuerdo.