El mercado automovilístico también vive su época particular de vacas flacas. Las ventas no levantan cabeza y durante la primera mitad de julio volvieron a descender, en concreto un 23%, ya que sólo se facturaron 52.200 unidades, según datos de MSI para la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto).

Por otra parte, el consumo de combustibles de automoción se situó en mayo en 2,566 millones de toneladas, con lo que la cifra también supone un retroceso, del 4%, respecto al mismo periodo de 2007.

La primera quincena del mes de julio vio una nueva merma en las matriculaciones de turismos y todoterrenos, que sólo alcanzaron las 52.200 unidades, un 23% menos. De esta cantidad, cerca de 25.000 correspondió a la demanda de particulares, lo que reflejó un descenso superior del 30%, consecuencia de factores como el endeudamiento familiar, los elevados tipos de interés, la falta de confianza en la economía o los altos precios del petróleo. Por su parte, las compras por parte de empresas de alquiler bajaron un 16,5%.