Si hoy está dispuesto a coger el coche para marcharse de vacaciones rumbo a sus vacaciones, debe tener en cuenta que llenar el depósito cuesta de media 19 euros más que hace un año si reposta gasóleo, o más de 9 euros si llenamos el vehículo con gasolina. En lo que va de año el precio del litro de gasolina ha subido casi un 14%, mientras que el gasóleo ha llegado a una subida del 20,6%.

Los precios de la gasolina y del gasóleo mantienen su escalada y marcaron esta semana sendos récord, al situarse en 1,270 y 1,323 euros el litro, respectivamente, según los datos del último Boletín Petrolero de la Unión Europea.

La gasolina pulverizó la anterior marca de 1,260 euros, registrada la semana pasada, mientras que el gasóleo no sólo se consolidó por encima de los 1,3 euros el litro, sino que superó el anterior récord, de 1,308 euros, marcado a comienzos del junio. En lo que va de año, el precio de la gasolina super 95 acumula una subida del 15,9%, mientras que el diésel es un 24% más caro. Con respecto a la misma semana de hace un año, la gasolina ha subido un 16,5% y el gasóleo, un 35%.

Con el actual nivel de precios, llenar un depósito medio de gasolina de 55 euros cuesta ahora 69,8 euros, 9,5 euros más que hace un año, mientras que el llenado del depósito de gasóleo alcanza los 72,7 euros, 19 euros más.

Revisar al alza la previsión de demanda

Los altos precios de la gasolina y el gasóleo coinciden con una mejora estacional de la demanda provocada por el periodo vacacional y con altos precios del petróleo, que se sitúan por encima de los 135 euros el barril.

Precisamente hoy la Agencia Internacional de Energía (AIE) revisó ligeramente al alza su previsión de demanda global de petróleo en 2008 y prevé que crezca un 1,1 por ciento en 2009, debido sobre todo a los países emergentes.

En su informe mensual, la AIE elevó en 80.000 barriles diarios (bd) su previsión de la demanda mundial de productos petroleros este año, hasta los 86,9 millones de bd, porque el sólido crecimiento en los países en desarrollo compensará la contracción en los Estados ricos.

Por una parte, la AIE rebajó en unos 50.000 bd la demanda prevista de los países industrializados, mientras que elevó en 130.000 bd la de los países que no forman parte de la OCDE. Esta revisión refleja esencialmente ajustes al alza en el Oriente Medio, por una demanda mayor de la prevista de carburantes en Irán y Arabia Saudí, y, en menor grado, en China, donde se revisó la perspectiva de la demanda de nafta. Para 2009, la AIE prevé que la demanda global alcance los 87,7 millones de bd, un incremento anual similar al de 2008.