Concretamente, el informe incluye una investigación de la Universidad de Cambridge, que demuestra que tecnologías como la detección de la ubicación vía dispositivos móviles permitiría ahorrar 600 millones de dólares a las aerolíneas localizando pasajeros, enviándoles mensajes y dirigiéndoles a las puertas de embarque con mayor eficiencia, mejorando los tiempos de respuesta y reduciendo los retrasos.

Así, los 3,2 billones de teléfonos móviles que hay en todo el mundo podrían transformarse en "herramientas indispensables para la industria aérea dentro de cinco años", recalcó la compañía, quien recordó que los móviles pueden utilizarse como carpetas de viaje personales para guardar tarjetas de embarque, información sobre la localización de equipaje y datos de pagos. "Existe también la posibilidad de que en el futuro puedan emplearse para guardar información biométrica y de visados", recalcó SITA.

El estudio señala además que con las actuales tasas de crecimiento actuales, en 2011 los clientes de móviles deberían ascender a cinco billones y "la funcionalidad de sus dispositivos se verá incrementada y sofisticada". "Para la industria del transporte aéreo, esto abre las puertas a una nueva forma de hacer negocios, ya que los teléfonos móviles están siendo utilizados actualmente por el 90% de los pasajeros aéreos", puntualizó la compañía.

El presidente de Tecnología de SITA, Jim Peters, consideró que estos "viajeros digitales", dispondrán de un rango de servicios de acceso por conexión móvil con servicios como actualizaciones de vuelos en tiempo real, autoservicio de reservas, facturación y embarque, y pagos con el móvil".

Peters recordó que algunos de estos servicios ya están disponibles para los pasajeros en países como Noruega, Japón y Alemania, en los que "viajar sin papeles en algunas rutas ya es una realidad".

Según SITA, a finales de 2010, el 67% de las aerolíneas ofrecerán facturación móvil y el 82% tiene previsto ofrecer servicios de notificación en los móviles y consideró que con el uso de dichas terminales como dispositivos de localización los aeropuertos podrían trasladar a los pasajeros de forma "más eficiente" e ingresar los beneficios por la comercialización de dichos servicios.

Por su parte, el presidente ejecutivo de SITA, Francesco Violante, aseguró que la industria del transporte aéreo "necesita abrazar estas tecnologías 'radicales'" y apuntó que la "recompensa consistirá en una mejora de los tiempos de respuesta, un incremento en los niveles de autoservicio y una nueve fuente de ingresos".