El director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, dijo ayer que "el mundo está en crisis" por el alza de los precios del petróleo y de los alimentos, y alertó de que algunos países se hallan en "un punto crítico".

El mundo ha encajado mejor de lo previsto la espiral de precios de las materias primas gracias a que venía con el empuje de la mayor expansión económica desde hace más de cuarenta años, pero las reservas se encuentran ahora en mínimos en muchos lugares, alertó el Fondo Monetario Internacional (FMI).

"Si los precios de los alimentos suben aún más y los del petróleo se mantienen, algunos gobiernos ya no podrán alimentar a su población y, al mismo tiempo, mantener la estabilidad de sus economías", advirtió Strauss-Kahn en una conferencia.

En África, el continente más amenazado, están en peligro las mejoras económicas de los últimos años y el progreso hacia los Objetivos del Milenio de la ONU, según el jefe del FMI. Otros países especialmente vulnerables son Haití, Nicaragua y Honduras en América Latina, y Mongolia, Pakistán y Bangladesh, en Asia, por ejemplo, porque son importadores netos de petróleo y comida, de acuerdo con el FMI, que divulgó ayer el primer análisis detallado sobre el tema.