La tendencia alcista del euribor sigue imparable. El indicador más utilizado para el cálculo de hipotecas ha cerrado el mes de junio en el 5,361%, su máximo histórico mensual. Estos datos, que deberán ser confirmados por el Banco de España a mediados de julio, suponen para las hipotecas contratadas hace un año un incremento de cerca de 900 euros anuales, mientras que los que tengan revisión semestral el aumento será de unos 50 euros al mes es decir unos 600 euros más al año.

Desde que comenzara a cotizar, el euribor sólo había superado el 5% en cinco ocasiones, entre julio y noviembre de 2000. Con este porcentaje el euribor marca un máximo histórico mensual, al situase 0,113 puntos por encima del nivel más alto de toda su historia, el 5,248 por ciento que marcó en agosto de 2000.

Este repunte, que coloca al indicador ocho décimas por encima de lo que marcaba hace en junio de 2007, el 4,505%, implica una subida de la cuota tanto para las hipotecas contratadas hace un año como para las que se contrataron o se revisan semestralmente.

Así, en una hipoteca media, que según los últimos datos del INE correspondientes el mes de abril, se sitúa en 141.422 euros, con un diferencial medio de 0,50 puntos y un plazo de amortización de 25 años, los usuarios que revisen sus hipotecas con el Euríbor de junio verán incrementadas sus cuotas mensuales hasta los 899,21 euros, 72 euros más que los 827,15 euros que pagaban en junio de 2007, y 864 euros más al año.

En caso de que la revisión sea semestral la subida es menor. En concreto, los usuarios pagarán tras la subida de junio 851,15 euros al mes, lo que supone 48,15 euros más que en diciembre de 2007 y 577,8 euros más al año.

Venía avisando

A pesar del mantenimiento de los tipos de interés, este indicador ha registrado diversos récords intradiarios hasta situar la tasa mensual de junio en máximos históricos como consecuencia del cierre de los mercados internacionales y la falta de liquidez.

El presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, aseguró hace unos días que "es posible" que adopte una subida de los tipos de interés en julio para atajar la "alerta" por la elevada inflación en la zona euro. Sin embargo, esta posible subida ya ha sido descontada por los mercados, que han reaccionado antes de tiempo a la subida.

Además, según algunos expertos, el Euribor está "distorsionado" por los problemas de liquidez y de riesgo del crédito que viven los mercados, y no responde únicamente a lo trazado por el regulador europeo.

Los analistas financieros prevén a que este indicador continuará su escalada alcista, aumentado la deuda de las familias, que a partir de este mes de junio también harán frente a la subida de las tarifas de la luz, el encarecimiento del crudo y al aumento de la inflación.