La Comisión Europea acordó ayer las bases de un paquete de "medidas de emergencia" para ayudar al sector pesquero a paliar los efectos de la crisis del petróleo, que también contempla los "problemas estructurales" de la flota europea.

Entre las propuestas figura la derogación durante un periodo de dos años de algunas limitaciones al Fondo Europeo de Pesca, con el objetivo de que los Estados miembros tengan una mayor flexibilidad a la hora de repartir las ayudas al sector, tal y como pedía España.

Según informó Bruselas en un comunicado, el paquete será discutido durante el Consejo de ministros de Agricultura y Pesca de la UE -que tendrá lugar el próximo 24 de junio en Luxemburgo- y la Comisión prevé adoptar una propuesta formal a principios del mes de julio.

El comisario de Pesca y Asuntos Marinos, Joe Borg, afirmó que la flota europea ha formado durante años un "círculo vicioso de sobrecapacidad, sobrepesca y disminución de la rentabilidad" que la ha convertido en un sector "más vulnerable que otros" al fuerte incremento de los costes. Borg aseguró en un comunicado que la Comisión "entiende" que es necesario emprender una acción coordinada a nivel europeo para evitar una "crisis severa para la industria".

En esta línea, el comisario advirtió que para ello no basta con permitir una ayuda de emergencia al sector, sino que la solución pasa por afrontar el problema del exceso de flota que "está minando todos nuestros intentos por recuperar la industria con el equilibrio de la sostenibilidad y los beneficios".