"El Gobierno garantizará la libre circulación de aquellos transportistas que quieren trabajar que son la mayoría". Con esta frase, el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, reclamó ayer a los transportistas que pongan fin al paro y que las patronales convocantes se sumen al acuerdo que el Ministerio de Fomento han suscrito con la mayoría del sector. Además, advirtió que el Gobierno tendrá "tolerancia cero" con todos aquellos actos de violencia y coacción que se registren. Mientras, el PP reclamó la comparecencia urgente del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ante su "clamorosa" pasividad y consideró que el Ejecutivo debería indemnizar al sector, agricultores y ganaderos. La advertencia de "tolerancia cero" de Zapatero fue secundada por el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, que llegó a pedir incluso "más contundencia" al Ejecutivo para lograr el fin del paro de transportistas. A juicio de Díaz Ferrán, lo que han hecho los piquetes es "muy dañino" para todos los españoles, por lo que el Gobierno debe tomar "medidas serias" para que "no se pisotee" este derecho, por lo que consideró que el Ejecutivo "tiene que ser muy duro y tiene que hacer respetar la ley", al tiempo que reiteró que la patronal rechaza "totalmente la huelga".
