Solbes dice que los prespuestos de 2009 priorizarán el gasto social

El pleno del Congreso de los Diputados aprobó hoy el límite de gasto no financiero del presupuesto del Estado de 160.158 millones de euros previsto para 2009, con el apoyo del Grupo Socialista, el voto en contra del PP, de UPyD y de IU-ICV, y la abstención del resto de grupos.

Los ingresos se situarán el próximo año en 165.414 millones de euros, un 4,2 más que este año, mientras que los gastos alcanzarán los 165.237 millones de euros. La Cámara dio también el visto bueno al compromiso del conjunto del sector público de mantener la estabilidad presupuestaria los próximos tres años (superávit del 0,8% del PIB en 2009, del 0,7 en el 2010 y del 0,8 en el 2011).

El ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, destacó que el límite de gasto no financiero fijado para 2009 es un 5% mayor que el de este año, con lo que el Ejecutivo mantendrá su compromiso de que crezca en proporción al PIB nominal.

Durante el debate en el Congreso para la aprobación del techo de gasto y el objetivo de estabilidad presupuestaria del Estado para el ejercicio 2009, Solbes destacó que permitir que funcionen los estabilizadores automáticos es "un lujo que pocos países pueden permitirse", y explicó que ello es consecuencia de la actuación pasada del Ejecutivo, que ha permitido a las cuentas públicas estar "mejor preparadas".

Por ello Solbes subrayó que el Gobierno mantendrá el eje de la estabilidad presupuestaria para la puesta en marcha de reformas sectoriales y la "mejora del marco regulador" con el fin de impulsar la actividad y competitividad de las empresas y servicios españoles.

Gestión austera del gasto público

El vicepresidente económico apuntó que las menores tasas de crecimiento llevarán a un "deterioro" del saldo presupuestario, por lo que se impulsará la actividad económica a través de una gestión "austera" del gasto público, "con la única excepción" de las partidas para el gasto social y el gasto productivo para reorientar el modelo de crecimiento. "Las dificultades a corto plazo no deben desviarnos de nuestros objetivos", señaló.

Asimismo, destacó el impacto del paquete de medidas económicas aprobado en abril por el Gobierno, que llevarán a una inyección a la economía de 10.000 millones de euros y una cantidad "casi equivalente" en el año próximo, cuyos efectos empezarán a percibirse a partir de junio.

El vicepresidente reiteró que la coyuntura que atraviesa la economía española responde en su mayoría a "factores de procedencia externa", como el repunte de la inflación por el precio del petróleo y los alimentos, y también a las turbulencias de los mercados internacionales junto a un ajuste en el sector de la construcción residencial "más rápido de lo inicialmente esperado".

Imposible alcanzar superávit

De esta forma, el Gobierno admite que es prácticamente imposible plantear un escenario de superávit presupuestario con un crecimiento económico que, según los analistas, alcanzará este año y el próximo, en el más optimista de los escenarios posibles, una tasa del entorno 2%. La Ley de Estabilidad Presupuestaria establece que las administraciones públicas presenten equilibrio cuando el crecimiento económico se sitúe entre el 2% y el 3%. El Gobierno mantiene, de momento, la previsión de crecimiento del 2,3% para 2009 y 2010.

A pesar de que el Estado Central cerrará en equilibrio, el Ejecutivo fija para el conjunto de las administraciones públicas (Estado, Seguridad Social, comunidades y ayuntamientos), un superávit del 0,8% del PIB en 2009, del 0,7% en 2010 y del 0,8% en 2011, gracias fundamentalmente al saldo positivo que espera cosechar la Seguridad Social en el trienio (0,8% en 2009, 0,7% en 2010 y 0,6% en 2011).

Por su parte, las comunidades autónomas tendrán equilibrio en los próximos dos años y un ligero superávit del 0,1% en 2011, igual que el Estado, mientras que las cuentas de las entidades locales se mantendrán equilibradas a lo largo del trienio.

PP: NO han hecho más que gastar

El portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro, señaló que las cifras del Gobierno no recogen "para nada" una gestión austera de las cuentas públicas. "Usted lo que ha hecho en los últimos años es gastar", insistió el dirigente popular, quien cuestionó uno por uno los datos presentados por Solbes en su exposición inicial y le recordó los "padecimientos" de familias y empresas, especialmente las pymes, por una "verdadera crisis económica" que los socialistas siguen empeñados en negar.

A pesar de su rechazo al texto, Montoro ofreció la colaboración de su grupo al Ejecutivo para ayudarle con sus "soluciones alternativas" a elaborar un proyecto presupuestario "viable", que permita a las familias "ensanchar su corazón económico" para invertir y reactivar la economía, para lo que serán necesarias rebajas fiscales. "Los españoles no quieren ver que nos peleamos cuando está en juego sus puestos de trabajo", señaló invitando a las formaciones políticas a alcanzar un gran acuerdo sobre la economía.

El homólogo de Montoro en CiU, Josep Sánchez Llibre, reprochó a Solbes la falta de transparencia en la gestión económica del Gobierno, que se ha traducido, a su juicio, en que "dilapide" las arcas públicas en medidas "electoralistas" como las contenidas en el 'plan de choque' presentado por el Ejecutivo.

Desde el PNV, Pedro Azpiazu destacó que faltan "datos relevantes" y un cuadro macroeconómico "realista" de cara a los Presupuestos de 2009 para establecer los términos del debate de hoy. No obstante, consideró que lo avanzado por Solbes confirma que el Gobierno no va a garantizar una política "suficientemente anticíclica".