Las 240 aerolíneas miembros de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), que representan prácticamente la totalidad del tráfico aéreo, dejaron, ayer, de emitir billetes en el clásico formato en papel impreso, una medida que permitirá a estas compañías ahorrar más de 2.000 millones de euros.

En un escenario en el que estas compañías se enfrentan, entre otros retos, al encarecimiento del petróleo, esta iniciativa evitará, además, la tala de unos 50.000 árboles al año.

Según fuentes de la asociación y de la aerolínea Iberia, desaparece así el tradicional billete aéreo de papel, ya que todos los pasajes que se vendan serán electrónicos.

Hace cuatro años que IATA declaró su objetivo de "cero papel" a partir de junio de 2008 y valoró el ahorro que generará, ya que el billete tradicional, con varias hojas de papel, suponía un gasto aproximado de 8,5 euros frente al 0,8 del billete electrónico.

La mayor parte de las compañías ya han adoptado este último formato y hace tres meses el billete electrónico representaba ya el 93 por ciento de los pasajes emitidos.

Compañías como Air France, Lufthansa e Iberia destacaron recientemente la medida y recordaron que cualquier pasajero con acceso a internet puede imprimir su billete o tarjeta de embarque con un proceso más sencillo y rápido que el tradicional.

Iberia informó a principios de mayo de que el 99,3 por ciento de los billetes que emitía eran ya electrónicos.

La compañía española ha sido una de las aerolíneas de red con mayor porcentaje de billetes electrónicos emitidos, convirtiendo a España en un país líder del mercado europeo en la emisión de billetes en este formato.

Los miembros de IATA, creada hace 60 años, representan el 94 por ciento del transporte aéreo internacional.