El rotativo de Bonn "General Anzeiger" informa en su edición digital de que la Fiscalía no quiere pronunciarse por ahora sobre el caso, a la espera de estudiar el material incautado en las oficinas de Deutsche Telekom.

La empresa telefónica alemana reconoció el pasado fin de semana haber espiado las conversaciones telefónicas de varios periodistas y miembros destacados del propio consorcio en los años 2005 y 2006.

El propio presidente de Deutsche Telekom, René Obermann, había presentado pocas semanas antes una denuncia ante la Fiscalía de Bonn al tener conocimiento de las escuchas ilegales realizadas antes de su mandato.

El rotativo Financial Times Deutschland (FTD) revela en su edición de hoy que Deutsche Telekom ordenó ya en el año 2000 el espionaje de periodistas y de empleados sospechosos de filtrar informaciones, casi un lustro antes de lo que se conocía hasta ahora.

Añade que el espionaje tuvo entonces un alcance mayor aún que el que se produjo a partir del año 2005, ya que no se limitó a escuchas de las llamadas telefónicas de los periodistas o empleados de Telekom sospechosos.

El diario asegura que Deutsche Telekom llegó en el año 2000 a contratar los servicios de la agencia de detectives berlinesa Desa, fundada por antiguos miembros de los servicios secretos, con el fin de buscar una presunta filtración en la empresa.

La operación de espionaje, en la que se llegaron a usar ilegalmente cámaras ocultas de vídeo, se dirigió entonces contra el reportero jefe de FTD Tasso Enzweiler, que en aquella época publicaba con frecuencia informaciones exclusivas y confidenciales sobre Telekom.

Las informaciones recabadas por el periódico económico alemán revelan que Deutsche Telekom tejió durante años una red de chivatos y espías que actuaban contra periodistas y altos cargos de la empresa sospechosos de filtrar información confidencial.