Los secuestradores del pesquero español "Playa de Bakio" han informado de que en el barco hay por lo menos un herido, dijo Andrew Mwangura, director del Programa de Asistencia a Navíos del Este de África.

El responsable del citado programa, con sede en la ciudad keniana de Mombassa, declaró que los secuestradores informaron de la existencia del herido al Consejo de Ancianos de la localidad somalí de Bareda.

Este Consejo "negocia en estos momentos con los secuestradores" dijo Mwangura, quien señaló que no le precisaron si el herido es un miembro de la tripulación o uno de los cuatro asaltantes.

Según Mwangura, los atacantes, oriundos de Bareda, situada en la región somalí de Puntlandia, "han puesto rumbo a Obbia", a centenares de kilómetros al sur, a mitad de camino entre la punta del llamado Cuerno de África y Mogadiscio

El programa que encabeza Mwangura suele seguir los casos de secuestros de navíos que surcan las costas de Somalia, un delito muy frecuente en el vecino país, que vive desde 1991 sin que un Gobierno central haya logrado imponerse en esa nación.

Obbia se encuentra a medio camino entre la punta del Cuerno de África y la capital de Somalia.

En Nairobi la embajada de España, que también representa los intereses españoles en Somalia, trata de ponerse en contacto con las autoridades de la zona.

La diplomacia francesa, muy activa la semana pasada debido al secuestro de un yate de lujo, no quiso aclarar si los buques de la Armada francesa permanecen en la zona.

Anoche, Radio Nacional de España pudo hablar con el capitán del barco español, quien señaló que los miembros de la tripulación se encontraban bien.

La tripulación del atunero congelador "Playa de Bakio", con base en Bermeo (Vizcaya) y perteneciente a la Asociación Nacional de Armadores de Buques Atuneros Congeladores (ANABAC) de España, está formada por 26 tripulantes: 13 de origen africano y 13 de origen español (8 de Galicia y 5 del País Vasco).

Una fragata española que navegaba por el Mar Rojo puso rumbo anoche a la zona del incidente para auxiliar al atunero que, según informó el departamento de Agricultura, Pesca y Alimentación del Gobierno Vasco, está siendo llevado a tierra por los piratas.

La situación es especialmente delicada y confusa debido a los feroces combates registrados durante el fin de semana entre tropas gubernamentales, apoyadas por Etiopía, e insurgentes islámicos, que se cobraron la vida de más de 80 personas e hirieron a 119.