Dentro de las posibilidades, los equipos se construyen al gusto y a la medida del entrenador, por eso la elección del técnico del primer equipo para la próxima temporada será la primera decisión que tomará la dirección deportiva del Pontevedra.

El actual míster, Luismi Areda, llegó procedente del equipo juvenil de División de Honor, en el que ya estaba haciendo un buen trabajo, y logró el objetivo de la permanencia, algo que al comienzo de la segunda vuelta se presumía como un reto difícil. El entrenador fue capaz de recuperar a varios futbolistas que fueron muy importantes en el tramo final, como es el caso de Mouriño y Álex Fernández.

Luismi sabe que la decisión es del Pontevedra y, aunque está muy contento por haber logrado la permanencia y el título de la Copa Federación, considera positivo que la directiva haya optado por enfriar un poco las cosas. "Las decisiones hay que tomarlas en frío, no en caliente, y la salvación está muy reciente como para decidir nada todavía. Hay que pensar en lo que sea mejor para el club", afirma.

A Luismi le gustaría seguir al frente del primer equipo la próxima temporada y no descarta seguir ligado a la entidad granate aunque no sea en ese puesto. "Me considero un hombre de club y estoy agradecido al Pontevedra porque me dio la oportunidad de debutar como futbolista en Segunda B y ahora el destino ha querido que también debutase como técnico aquí", señaló.