El Condes Albarei Teucro disputa hoy un partido importante de cara a dar el paso casi definitivo hacia la permanencia en la visita que realiza al Pabellón Municipal el Bada Huesca. La televisión manda en este caso y por eso el encuentro se disputará a la poco frecuente hora de las cinco de la tarde.

Los azules quieren olvidar cuanto antes el amargo sabor de boca que dejó el encuentro de Copa del Rey del pasado miércoles en el que una desconexión al final del encuentro sumada a un más que riguroso arbitraje le costó la derrota al Teucro. Quique Domínguez y sus jugadores afrontan con motivación la jornada. "Es un partido muy importante. A nadie se le escapa que los partidos de casa cada vez van teniendo una trascendencia mayor. A medida que se acerca el final cada vez es más difícil puntuar porque todos los equipos tienen objetivos por los que pelear en este último tercio de liga. Espero un partido de mucha lucha e intensidad", comenta el técnico.

Los de Pontevedra deberán hacer frente al cansancio de la jornada entre semana con la plantilla mermada por las lesiones de Carlos García, Óscar Silva y José Rial. La buena noticia es el regreso del goleador cubano Yoan Balázquez, que ya ante el Guadalajara demostró estar en buenas condiciones para jugar.

Quique Domínguez respeta mucho al rival que tiene hoy en frente y habla así de ellos: "El Bada Huesca es un equipo que está haciendo una gran temporada, muy regular, tanto en liga como en Copa del Rey. Es un rival de esos que seguramente no tiene ninguna gran estrella o jugador que destaque por encima de los demás, pero sobre todo es un gran bloque, sobre todo en lo defensivo. Parten de una gran portería, con dos porteros jóvenes pero de calidad, y un 6-0 sólido con jugadores buenos en el uno contra uno y de una gran movilidad. A partir de ahí, uno de sus puntos fuertes son los contraataques".

Será un partido muy especial para un jugador del Bada en particular. El pivote argentino Gonzalo Carró viajará con su equipo por primera vez a Pontevedra desde que se fue hace campaña y media para vérselas contra muchos de los que hasta no hace tanto fueron sus compañeros en el Teucro. Carró ya había venido a la ciudad en enero para jugar el torneo que su selección disputó en Pontevedra y Vigo contra España, Polonia y Bielorrusia, pero no lo había hecho aun en liga.

Domínguez volvió a pedir a la afición su ayuda para este importante cita. "Ojalá que contemos con un poquito más de respaldo que el que tuvimos en Copa. Siempre se agradece mucho ver a tu público empujándote, sobre todo cuando las cosas no ruedan tan bien como s el caso ahora con las lesiones. Entre todos tenemos que sacar el partido adelante", apuntó.