El Poio Pescamar logró ahogar sus penas de los últimos resultados con una gran goleada en el derbi gallego ante el Cidade das Burgas. Dos tantos tempraneros pusieron el partido muy de cara para las de Marcio Santos, que pudieron jugar con más tranquilidad y vencer su segundo encuentro en los últimos nueve partidos.
Pese a que el equipo ourensano quiso comenzar mandando, quien comenzó golpeando fue el Poio. Apenas había transcurrido un minuto cuando Iria Saeta hacía mella en la crisis del equipo de su vida. La ourensana aprovechaba un robo de balón de un Jenny en primera línea de presión y fusilaba a su excompañera homónima.
Poco después, Ceci aprovechaba un envío en largo de Silvia que no lograba blocar la cancerbera orensana para poner el segundo gol visitante. Ya llovía menos sobre las filas poienses.
Con 0-2 en contra, el Cidade trató de reaccionar subiendo la línea de presión. Por momentos, logró equilibrar el desarrollo del juego, pero su falta de acierto impedía que se metieran en el partido.
Mientras, el Poio seguía a lo suyo. Más agazapado atrás y buscando la contra. Aunque el tercero llegó a balón parado. Antes del descanso Ale de Paz cazaba un balón suelo a la salida de un saque de esquina y ampliaba aún más la ventaja.
En la segunda aparte, el Poio Pescamar optaba por contemporizar sus posesiones y jugar con el marcador a favor, ante un Cidade que optaba por presionar en mitad de cancha y tratar de sorprender con balones en largo.
Pero nuevamente el equipo rojillo penalizó los errores locales. La brasileña Delise se estrenó aprovechando un robo en primera línea para plantarse ante Iria y superarla por alto.
Antes del ecuador del período, Jenny estuvo lista para aprovechar de nuevo una mala salida de balón local y redondear un marcador que da moral a su equipo para afrontar el futuro y tratar de meterse en la Copa.
