Subió gracias al apoyo económico del Lugo, que le compró plaza en Segunda B. Y mañana debutará en la categoría de bronce en Pasarón, un campo que al Cerceda no se le ha dado nada mal en los últimos años.

Durante las cuatro temporadas que el Pontevedra encadenó en Tercera División, el cuadro cercedense fue siempre un rival directo en la lucha por el play off de ascenso. Y en los duelos directos, causó muchos quebraderos de cabeza a la parroquia granate.

De hecho, tan solo en la temporada del ascenso, con todo ya resuelto, el Pontevedra fue capaz de vencer al equipo blanquirrojo en Pasarón (1-0, con gol de Campillo). Era la última jornada y el equipo de Luisito ya era campeón y los de O Roxo simplemente se jugaban su posición en el play off de ascenso.

Sin embargo, las tres campañas anteriores, en las que el bloque lerezano acabó sin salto de categoría, el Cerceda sacó siempre algo positivo del estadio de O Burgo. El curso anterior, la campaña 2013-2014, el conjunto dirigido por José Luis Lemos venció por 1-2 gracias a dos tantos de Jorge Cano.

Mientras, en la temporada 2012-2013, la escuadra coruñesa también sacó un 0-1 de Pasarón. Esa temporada fue aciaga para el cuadro lerezano, dirigido por Milo Abelleira, ya que ni siquiera logró meterse entre los cuatro primeros.

Por último, el primer año del conjunto pontevedrés en Tercera División, el Cerceda logró una igualada 2-2 en Pasarón. Ese curso, ambos acabaron con 70 puntos, pero el equipo blanquirrojo fue tercero y relegó al Pontevedra a la cuarta posición precisamente por el goal average.

Derrota en la ida

Por otro lado, el precedente más cercano tampoco favorece al Pontevedra. El equipo dirigido en aquel entonces por Luisito viajó en la jornada 3 a O Roxo para acabar con su dinámica inicial de dos derrotas. Y acabó con una tercera en su hoja de ruta.

Pese a que el Pontevedra controló el partido aunque sin tener grandes oportunidades, un gol de Dani Pedrosa en los últimos 15 minutos de juego tras un error en cadena en defensa condenó al bloque pontevedrés. Ahora, la situación es muy diferente. El Pontevedra llega sin cumplir las expectativas, pero el Cerceda no se parece en nada a quel equipo sólido y correoso.