Partido vital este último de la primera vuelta para el Marcón Atlético. El conjunto de Borja Burgos recibe en O Carrasco a las 16.30 horas a un Gondomar que se perfila como un rival directo para salvar la categoría.

El equipo local acumula tres victorias consecutivas a domicilio que le han alejado de los puestos de peligro, pero no gana en su casa desde el 12 de noviembre, cuando se impuso por 1-0 al Campo Lameiro. Fue su segunda y última victoria como local.

Ahora, el bloque blanquiazul buscará iniciar el año 2018 con buen pie y amarrar en casa lo que gana fuera. Para ello, deberá imponerse a un Gondomar que es quinto por la cola con 18 puntos, uno más que el Erizana, que marca el descenso directo, y tres menos que el Marcón, que es décimocuarto.

Los de Gondomar han cosechado seis de los últimos 12 puntos en juego y en su último partido fuera golearon por 1-5 al Beluso. El choque, pese a estar todavía en el ecuador, se antoja ya trascendental.