Para Víctor Rodríguez esta fecha, la de su regreso a Pontevedra después de dos temporadas, estaba marcada en el calendario. El jugador regresa a un pabellón en el que disputó los partidos como local durante tres campañas.

- Partido especial para usted. ¿Lo tenía marcado en su calendario?

- Cuando salió el calendario, ya te vas fijando en un par de fechas, y esta es una de ellas. Es volver a jugar en casa, contra muchos amigos, está claro que no es un partido más aunque dentro de la pista sí lo sea. Cuando llegue al pabellón voy a volver a ver a mucha gente conocida, en Pontevedra estuve tres buenos años y va a ser bonito volver a verlos a todos.

- ¿Sigue en contacto con algunos de los jugadores con los que compartió vestuario en el Teucro?

- Yo siempre sigo toda la liga, estoy viendo al Teucro cuando puedo y un poco a los demás rivales. Tarde o temprano acabas jugando contra todos y viene bien ir viéndolos. Con los viejos compañeros que todavía quedan en Pontevedra sí que mantengo el contacto y espero que les vaya muy bien. Aunque este sábado, un poquito peor.

- ¿Cómo recuerda su marcha? En un principio usted era una de las piezas importantes con las que se contaba para tratar de regresar a Asobal.

- Tenía aun un año más de contrato. Pero me surgió esta oportunidad en Valladolid, me paré a pensarlo, y tomé la decisión. Con el tiempo me daré cuenta de si fue algo bueno o malo, de momento me está yendo todo bien y espero que así siga.

- ¿Le ataca la morriña?

- Yo soy una persona a la que le gusta mucho el mar y aquí en Valladolid eso no lo tengo. En los primeros meses me adapté incluso demasiado bien. Me esperaba que me fuera a costar más, aunque es cierto que cuando me vengo de vuelta unos días siempre me cuesta regresar para allí, después una vez llego estoy muy a gusto.

- ¿Qué valoración hace de su etapa en Valladolid? Al que siguió su trayectoria en Pontevedra le llamará más la atención que ha ganado peso en ataque.

-Sí, aquí he cambio en ese aspecto. Empecé trabajando tanto en ataque como en defensa y creo que lo estaba haciendo bien. En el Teucro, sobre todo durante el último año, sí que estaba más de cara a defender y tenía muy pocos minutos en ataque. Aquí estoy compaginando las dos facetas y espero poder seguir mejorando y avanzando en ese aspecto.

- ¿Cómo espera que le reciba el Municipal?

- Yo espero que bien. Los tres años que estuve allí siempre me dejé todo en la pista y, cuando hubo que partirse la cara, lo hice. Todos lo dimos todo cuando estuvimos ahí y espero que tanto a mí como a varios de mis compañeros que también jugaron en el Teucro, como Javi (Díaz) y Diego (Camino), nos reciban bien.