El Pontevedra Juvenil estrenó su casillero de victorias en casa de la mejor forma: con una gran goleada sobre un rival directo. El Alondras compitió contra el equipo granate, que en cinco minutos fantásticos de la segunda mitad a partir de la hora de juego, sentenció el encuentro.

Iñaki y Garrido fueron los grandes protagonistas del partido. El extremo hipano-mexicano abrió el marcador antes del cuarto de hora y puso el partido de cara para el cuadro local.

Con el encuentro de cara, el conjunto granate supo dominar, generó ocasiones y mató en la segunda mitad al Alondras para endosarle cinco puntos de diferencia al equipo que marca el inicio de los puestos de descenso.