El Pontevedra tendrá este domingo en el estadio ferrolano de A Malata dos malas rachas a las que tratar poner fin de un mismo plumazo.
El cuadro granate buscará por un lado apuntarse el primer derbi gallego del año después de no ser capaces de superar a ninguno de sus rivales vecinos ni en este comienzo de liga ni durante la segunda vuelta de la temporada pasada en la que se enfrentaron a Rácing de Ferrol, Somozas, Celta B, Coruxo y Boiro.
A los de Pasarón les restan ahora tres partidos más ante clubes gallegos en liga contra los ferrolanos y después ante Coruxo y Deportivo B, bestia negra del equipo en la etapa de Tercera, para poner fin a esta cruz de resultados.
Por otro lado está el rendimiento fuera de casa. El Pontevedra todavía no ha conseguido puntuar esta campaña lejos de su afición luego de tres partidos de liga en los que ha caído en Vigo, Cerceda y Fuenlabrada. Además el balance goleador tampoco es el más positivo al llevar cinco goles en su contra por su solo uno a favor, el que convirtió David Añón para recortar distancias en Barreiro.
