El Cisne Colegio Los Sauces prolonga su estado de felicidad. Ayer venció en el Centro Galego de Tecnificación Deportiva (29-28) a un Amenabar que también llegaba triunfante de su difícil choque de la primera jornada. Los de Jabato dominaron casi todo el partido con cierta holgura, pero un pequeño bajón en los últimos 10 minutos dio alas al Amenabar e hizo que el triunfo final de los locales no estuviera exento de emoción.

En el arranque del encuentro el Cisne adquirió ventaja con relativa facilidad. Jugó un balonmano intenso que le llevó a obtener pronto una diferencia de tres goles sobre su rival.

Un Alexandre Chan fino en el lanzamiento (5 goles), acompañado también en esta faceta por Andrés Sánchez y Casares (ambos con 5 tantos) fueron engordando la ventaja del conjunto local. Antes de los 10 minutos de encuentro, la diferencia en el marcador de 7-3 hacía pensar que, de mantener el nivel y el ritmo de juego, podría ser un compromiso más fácil de resolver de lo esperado. Las diferencias se acortaron y volvieron a engordar después, pero se mantenía un colchón cómodo para el Cisne.

Los últimos minutos, sin embargo, el brazo del visitante Balenciaga advirtió su poderío. El jugador del conjunto vasco logró poner el empate cuando restaban poco más de 5 minutos para la conclusión del choque. Pero en los instantes decisión, Chan volvió a aumentar la diferencia a dos goles, dando un respiro al CGTD y el gol final de Iraeta solo sirvió para acortar diferencias y dejar un emocionante 29-28.