El Sporting de Gijón se adjudicó el trofeo Ciudad de Pontevedra en Pasarón (1-3) en un partido escaso de afición en el que, como ocurrió ante el Deportivo, el rival se vio beneficiado por concesiones en defensa de los de Luisito. Jorge Hernández fue el jugador más destacado del equipo pontevedrés y autor del tanto local.
En el tercer compromiso de pretemporada del Pontevedra, Luisito probó un sistema novedoso en el once : Tres centrales con los laterales de largo recorrido y dos puntas abiertos personificadas en las figuras del canterano Lezcano y Jorge Hernández. Finalmente los cinco jugadores tocados de la pasada semana pudieron gozar de minutos, si bien Álex González se quedó fuera de la convocatoria a última hora y los juveniles Garrido, Antón y Juan no salieron a jugar.
Los primeros minutos no fueron los más vistosos pero sí tuvieron la oportunidad de lucirse a los dos equipos en los dos lados del campo. Las maneras que ya demostró Jorge Hernández en Moraña, las volvió a demostrar ayer en Pasarón con unos primeros 45 minutos de gran calidad, con movilidad y con gol incluido. El menudo mediapunta zamorano entendió a la perfección lo que Luisito reclamó de él y fue un incordio para la defensa asturiana. En un robo suyo estuvo la primera ocasión granate en una jugada que no tuvo mayor trascendencia al ser interceptada por la defensa.
Superado el primer cuarto de hora de encuentro, los de Paco Herrera comenzaron a asentarse en el campo y a pisar con más frecuencia él área rival. Así, Edu tuvo que desbaratar la primera ocasión clara con un remate franco de Viguera dentro del área que le obligó a lucirse por alto.
Poco después el propio Viguera tuvo la segunda en un chut cruzado que nuevamente hizo brillar al meta pontevedrés. El gol rojiblanco estaba rondando y en la jugada siguiente llegó el 0-1 con un remate de cabeza de Juan, solo dentro del área que golpeó en el larguero antes de acariciar la red.
Con el marcador desfavorable el Pontevedra fue poco a poco recobrando el control y Jorge Hernández le puso las ocasiones al bando pontevedrés. Primero en un disparo cruzado tras pase en profundidad de Lezcano que se marchó rozando el palo derecho y después con la jugada que supuso el empate.
El fichaje llegado desde Alcoi realizó un brillante control orientado en tres cuartos de campo que dejó descolocada a la defensa sportinguista. Con espacio suficiente para armar la pierna conectó un preciso disparo pegado a la cepa del poste que hizo imposible la estirada de Mariño y que se ganó la ovación de Pasarón a diez minutos para el descanso. Con estas tablas se llegó al descanso.
En la segunda parte Luisito dio entrada ya a Anxo, Kevin, Mouriño y Añón pero manteniendo la formación de inicio.
Tras unos primeros quince minutos sin ocasiones de consideración, llegó el segundo gol del Sporting en una jugada de pillo que se encontró totalmente despistada a la defensa del Pontevedra. Mouriño no estuvo hábil al impedir sacar una falta lateral al debutante del Sporting Rubén García, y éste asistió a placer a Pablo Pérez para que enviase la pelota al fondo de la portería casi sin oposición. La respuesta de Luisito fue introducir tres cambios más. Prosi, Etxániz y Marcos Álvarez, que debutaba hoy tras no poder estar en los dos amistosos previos.
A poco menos de diez minutos del final Rubén García sentenció para los asturianos al beneficiarse del rechace corto dejado por Anxo tras detener un disparo de Carlos Castro. Antes el Pontevedra había rozado el empate en un centro de Etxániz al área que golpeó en un defensor y se fue envenenando para obligar a Dani a tirarse al suelo.
El Pontevedra lo intentó de ahí al final pero no conseguía materializar en peligro los escasos acercamientos por las inmediaciones de la meta rojiblanca más allá de un par de acciones a balón parado. Mouriño tuvo en el tramo final la posibilidad de acortar distancias por medio de un disparo desde la frontal que apunto estuvo de subir al marcador.
