Faltan 12 días para conocer la composición definitiva de los cuatro grupos de Segunda B. Y estas fechas de espera están sirviendo para que cada una de las delegaciones territoriales confeccione sus propias preferencias.

La idea del Pontevedra y del resto del clubes gallegos pasa por jugar contra los tres asturianos, los seis castellanos y leoneses y los cuatro navarros, a día de hoy una nueva propuesta está cogiendo fuerza: la que ligaría el destino de los gallegos a Madrid, y Castilla y León.

De este modo, los siete gallegos tendrían que compartir grupo con Atlético B, Fuenlabrada, Navalcarnero, Rayo Majadahonda, Real Madrid Castilla, Sanse, Unión Adarve, Gimnástica Segoviana, Guijuelo, Mirandés, Ponferradina, Burgos y Valladolid B.

Esta opción tendría el hándicap de separar a Madrid de Canarias, dos comunidades íntimamente unidas debido al mayor número de vuelos entre ambas, pero fue la primera opción emitida por los clubes navarros y parece ser la que más adeptos tiene.

Asimismo, una opción muy similar pasaría por sustituir al Burgos y al Mirandés, ambos de la provincia burgalesa y que pasarían al Grupo II, por los castellano-manchegos Toledo y Talavera.

Lo que parece complicado es que el Racing de Santander, uno de los equipos más potentes de lacategoría, se vuelva a medir al Pontevedra en fase regular.