La plantilla del Pontevedra se puede quedar más que perfilada de cara a la vuelta al trabajo programada para mediados del presente mes de julio (día 17). A día de hoy Luisito ya dispone de 16 jugadores de la primera plantilla con los que poder empezar a trabajar este verano, una lista a la que seguramente se añadan más nombres antes de pisar los campos de entrenamiento por primera vez.

Con la portería ya cerrada con Edu y Anxo, a la dirección deportiva le toca seguir cerrando líneas toda vez que se necesitan por lo menos 4 refuerzos entre las tres líneas del campo. Para cerrar el plantel es necesaria la incorporación de un lateral zurdo, un mediocentro de vocación ofensiva y dos jugadores de ataque, de los que uno sería un "nueve" y el otro un perfil más de banda, si bien solo los casos del ariete son los que se consideran prioritarios junto al del lateral y el mediapunta.

El club dejará abierta la puerta a poder sumar un mayor número de efectivos hacia el tramo final del mercado de fichajes, cuando las pretemporadas y los descartes en otros clubes marquen las posibilidades de acudir nuevamente al mercado en el caso de que Luisito y Roberto Feáns lo estimen oportuno y la economía del club lo permita.

Entre los nombres que la dirección deportiva baraja para estas incorporaciones se encuentra el defensor gallego Fernando Pumar, cuyo futuro en Murcia está bastante complicado después de tres campañas en la Nueva Condomina tras firmar procedente del Rácing de Ferrol. Otro de los nombres que se ha relacionado con el Pontevedra también tiene pasado en el fútbol gallego antes de hacer las maletas. Se trata del centrocampista Diego Peláez, quien formó parte de las categorías inferiores granates hasta el año 2011. En cualquier caso su incorporación a las filas lerezanas no será sencilla al tener contrato con el Sabadell hasta junio de 2018 tras firmar en el pasado mercado de invierno procedente del Marbella.

Destinos de los ex

En poco tiempo ya se han ido confirmando los primeros fichajes de los jugadores que han abandonado las filas pontevedresas esta temporada. El lateral zurdo Javi Bonilla será nuevo jugador del Mallorca, mientras que Trigo lo hará en el Rácing de Ferrol e Íker Alegre en el Caudal de Mieres. Pendientes de su futuro se encuentran los cedidos el pasado año Mario Barco y Eneko Eizmendi, que buscarán una oportunidad en Segunda División en Lugo y Albacete respectivamente. En el caso del último pichichi del Pontevedra, su futuro puede pintar también grana y junto a Bonilla puesto que el Mallorca también ha mostrado interés en contar con sus servicios en el caso de que el Lugo no cuente con él.

Todavía en fase de resolver su futuro están Portela, Capi, Miki, Jacobo o Abel Suárez. En cuanto a Mateu Ferrer, su destino pasa por encontrar acomodo en un equipo de las Islas Baleares mientras que Miguel Loureiro podría anunciar muy pronto su futuro al tener un acuerdo prácticamente cerrado con el Córdoba.